Educación ya tiene planes para extender su red de centros MUS-E en Ceuta. Se trata de un programa que fomenta la educación en valores a través del arte y la cultura como herramientas que favorecen la convivencia.

Su encuentro anual en la ciudad ha congregado este martes a medio millar de estudiantes, profesores y familiares en el Teatro Auditorio del Revellín, donde han participado en una obra de teatro colaborativa en la que han mostrado sus aptitudes en otras artes como la danza o la pintura.

De momento son diecisiete las instituciones de la ciudad autónoma que forman parte de la red internacional MUS-E, que este año celebra sus bodas de plata en España.

Tal y como ha recordado la directora de la Fundación Yehudi Menuhin, Anabel Domínguez, la iniciativa comenzó en el CEIP Príncipe Felipe, el Ramón y Cajal y el San Antonio y ahora son ya más de tres mil los estudiantes y una docena de artistas los involucrados en el proyecto.

En una fecha tan especial, Francisco Javier Amaya Flores, sub-director general de cooperación territorial e innovación educativa del MEFP también ha querido estar en Ceuta, donde ha adelantado que desde el Ministerio están trabajando para “ampliar la oferta” de centros adscritos a la iniciativa a través de convenio colaborativo.

En primer lugar, ha recordado el director general, “tiene que conformarse el gobierno y aprobarse los presupuestos, pero se planteará”.

“En el ánimo del Ministerio está que aquellos centros que adquieran el compromiso de formar parte de la filosofía MUS-E, tendrá el apoyo de Educación, que buscará el modo de que formen parte del convenio”, ha avanzado.

Entre vítores y gritos de “viva Ceuta y “viva España” Amaya se ha confesado “rendido” a los encantos de la ciudad frente a los jóvenes caballas. “Es un ejemplo de diversidad y convivencia”, ha valorado.

Una apreciación en la que ha coincidido Yolanda Rodríguez, directora provincial de Educación. “Habéis aprendido valores, tolerancia, inclusión y sobre todo habéis aprendido diversidad”, se ha dirigido a los jóvenes alumnos antes de dar comienzo a la función.

“Estos niños son del siglo XXI, este es su siglo, son el futuro”, ha expresado Domínguez, convencida en la idea de Menuhin de que, tal y como avalaban las sonrisas de los participantes en el encuentro ceutí, “un niño feliz es un niño que aprende”.