El grueso de los trabajadores transfronterizos que cada lunes se manifiesta en Ceuta frente a la Delegación de Gobierno sigue en la ciudad. Pero ya o s trata de que no puedan regresar a su país. La frontera lleva ya una semana abierta y podrían volver a Marruecos, incluso con su pasaporte caducado y ver a sus familias. Pero no quieren. No se fían. 

“¿Quién nos dice que no van a cambiar los requisitos de la noche a la mañana?”, pregunta la portavoz, Rachida Jraifi. “Además, es una pescadla que se muerde la cola. Sin el pasaporte no pueden pedir la renovación de la Tarjeta Identificativa de Extranjeros (TIE) , si la tiene caducada, y y en Marruecos la solicitud de cita para la renovación de documentos solo puede ser presencial.

Por ello, y tras las promesas de Delegación de Gobierno de que tendrían prioridad, piden un trato preferencial para poder renovar sus papeles sin la incertidumbre que rodea el proceso.  Quieren la certeza de poder tramitar la renovación del pasaporte y poder regresar cuanto antes. De momento, aunque podrían salir sin problema, no podrían regresar a su puesto de trabajo antes del 31 de mayo. Y tampoco entonces tendrían claro si podrían volver, sospechan.

Desde Delegación de Gobierno se comprometieron la pasada semana a informar personalmente a los afectados del proceso que deben seguir. Una reunión que debería producirse esta misma semana, aunque aún sin fecha.