- Apuestan por un Estado democrático debe ser neutral ante todas las creencias religiosas
- Consideran que debe efectuarse siempre a título privado, no como obligación colectiva e institucional
- “Creemos además que crear una fiesta de todas las culturas, no excluiría a nadie y correspondería con el sentido de aconfesionalidad y laicismo que defendemos”
Una voz laica se ha sumado al debate de la necesidad de considerar festivo en el calendario laboral el Eid El Fitr. Una voz laica que no llega ni de derecha ni de izquierda, sino del mismo centro, desde UPyD. La formación magenta, ausente desde hace meses con contadas excepciones durante la campaña, ha querido alzar una voz laica en el debate abierto por Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE) y secundado por Caballas y MDyC.
”Independientemente de nuestro absoluto respeto a todas las confesiones religiosas y creencias, que algunos compartimos e incluso fomentamos, desde UPYD defendemos que un Estado democrático debe ser laico, es decir, neutral ante todas las creencias religiosas”, explican.
La formación que lidera en Ceuta Julián Domínguez, defiende la religión como un ejercicio privado, nunca institucional, subrayan: “Creemos que la manifestación pública de las religiones es perfectamente lícita pero debe efectuarse siempre a título privado, no como obligación colectiva e institucional”, por eso abogan por que las festividades locales “deben irse progresivamente cambiando hacia festividades sin contenido religioso”.
Y hacen una propuesta transversal: “Creemos además que crear una fiesta de todas las culturas, no excluiría a nadie y correspondería con el sentido de aconfesionalidad y laicismo que defendemos. Seguir fomentando de manera populista por todos los partidos políticos, sin crítica alguna de éstos, ni de otros agentes sociales sigue siendo la peor manera de hacer más iguales a todos los españoles y en Ceuta a los ceutíes”.
”La religión pertenece al ámbito privado de la persona”, insisten, “y en un estado aconfesional, del que esperamos reformar por todos los españoles algún día la Constitución, se debe esperar la reducción de fiestas religiosas sean de la religión que sean, y su sustitución por fiestas laicas y que puedan ser compartidas por toda la ciudadanía”.