Poco ayudaron las palabras de López Garrido, que afirmó que el socialista es un Gobierno "dialogante" y que "se preocupa por los trabajadores", además de argumentar que la huelga de Justicia se debía a una reivindicación salarial. Alusiones que no gustaron nada a los trabajadores de Justicia. Tampoco ayudó el discurso del presidente de la comisión delegada del PSOE, Salvador de la Encina, que afirmó que una protesta de este tipo "no se la hacen a un Gobierno del PP" y que en ese caso "hubiesen sido desalojados por las fuerzas del orden".

El acto de presentación de candidatos, con apenas 200 presentes, de los que unos 50 eran huelguistas de Justicia, sirvió también para poner de manifiesto según la mayoría de periodistas presentes el rumor que corría por la calle en los últimos días, como es el nuevo enfrentamiento entre la Delegación del Gobierno y el sector oficialista del PSOE ceutí, representado por la ex secretaria general, Antonia Palomo. García Arreciado y Palomo apenas se saludaron, y las pocas palabras que cruzaron se produjeron tras percatarse de que eran objeto de atención de los periodistas. Posteriormente, Arreciado dejó su sitio en primera fila a los candidatos y fue testigo del acto desde un lateral.