Hace veinticuatro años. Pablo, mi hijo, acababa de nacer.
Joaquin Sabina y Viceversa andaban de gira, recuerdo meses antes aquel agosto en una caseta de Feria en mi ciudad, con una tripa de siete meses de gestación y gritándole guapo, sobre una silla que a la vez se apoyaba en una mesa pero es que yo era muy joven y no notaba lo riesgos.
Aquella canción era la premonición de lo que ocurriría años después, la mágica conjunción del azar para que yo anduviera pisando el acelerador y correr, correr, correr
Salir corriendo. Sentirme viva .
Sin mirar por el retrovisor
Corrí, corrí , corrí tanto y tan deprisa que se me olvidó divorciarme.
Ayer mientras hacía de testiga de la boda de unos amigos en el Juzgado me decía la funcionaria que figuro como casada.
Despúes de la sorpresa me dio por reír y aún sigo riéndome.
Por cierto: vale la pena
Posted originally: 2010-12-22 00:30:29