El pasado 17 de diciembre, Auberon39 ante una desoladora imagen de la Asamblea de la Región de Murcia planteaba uno de esos temas que vuelven continuamente: el absentismo de los parlamentarios en las sesiones de sus respectivas cámaras.
No voy a entrar en este asunto. Lo que sí quiero es señalar algo que lleva pareciéndome bastante absurdo desde hace mucho tiempo: la duración de los debates parlamentarios. La mayoría de las comisiones y de las sesiones plenarias no tienen ninguna trascendencia, pese a que los parlamentarios echan sus buenas horas allí y que se pelean por tener mejores turnos de intervención. A veces tengo la impresión que se habla o se trabaja para un hipotético historiador futuro que trabaje sobre el Diario de Sesiones.
Los verdaderos debates y las verdaderas negociaciones se hacen a puerta cerrada, cuando una mayoría absoluta no los hace irrelevantes. La discreción es fundamental en política, pero no comprendo el empeño que se tiene en aparecer en algo que a pocos interesa y menos atienden (pese a los canales parlamentarios que se han establecido). Los debates deberían limitarse a una toma de postura, para que la prensa tome los cortes para los informativos y pasar a las votaciones, ya que lo que no se haya negociado y acordado antes, nada cambiará se diga lo que se diga.
Posted in Celtiberia, PolíticaPosted originally: 2010-01-03 10:30:12