Hasta hace una semana, Joe Wilson era uno de esos congresistas anónimos que rara vez merecieron un titular más allá de Carolina del Sur, su "patria chica". Un solo exabrupto -"You lie!"-, lanzado desde el Capitolio como un rayo certero y divino, le han convertido en héroe indiscutible de la parroquia anti-Obama.
Leer