Hace unos días decía que buena parte de la inacción del PP, de las justificaciones y defensa numantinas y, sobre todo, de la autovictimización de los populares venían del hecho de tener encuestas favorables. Hoy “Público” saca una encuesta que refuerza a los conservadores, pese a la escasa valoración que su líder recibe.

Desde el PP se siente que, por fin, están sacando rentabilidad a la crisis económica y percibe nuevamente que los casos de corrupción no le perjudican. El tema de las (no) consecuencias electorales de la corrupción es fascinante, pero la realidad es que los populares no sufren por esta causa y que sus electores están contentos a pesar de todo.

Por otro lado el PSOE va perdiendo fuerza en su principal valor electoral, que no es otro que el Presidente Rodríguez Zapatero, aunque hoy puede que los tradicionales abucheos de los ultraderechistas le hayan ayudado algo en su popularidad.

Rosa Díez sigue creciendo electoralmente, llevándose parte del crecimiento que hubiera ido al PP. Si al PP le hemos oído hablar poco de medidas económicas, Rosa Díez aún no ha estrenado. No deja de llamarme la atención que se opte como “solución” en medio de una crisis económica por alguien que no se ha pronunciado ni mínimamente en este grave asunto.

Los “marianistas” piensan que los datos de las últimas encuestas refuerzan el siempre débil liderazgo del político gallego. Desde los socialistas se espera que la previsible recuperación económica, sirva para recuperarse el terreno electoral perdido, aunque también habrá los que comiencen a sugerir la oportunidad de una renovación en la candidatura a la Presidencia si se consolida la pérdida de popularidad de Zapatero.