La ministra quiso dejar claro que los responsables del hospital "cumplen escrupulosamente la normativa y velan por la buena praxis de la asistencia sanitaria". Por su parte, el senador indicó que el sistema sanitario de Ceuta está "sometido a una fuerte presión procedente del otro lado de la frontera, que, hasta cierto punto, es inevitable" dado el carácter "muy deficiente" de la sanidad en Marruecos.

Fernández Cucurull añadió que esta circunstancia "no se puede volver en contra de los legítimos beneficiarios" del sistema español de salud, "ni primar la asistencia de los extranjeros frente a los nacionales". El senador denunció las "carencias" de medios y personal en la sanidad de Ceuta, que, dijo, son "públicas y notorias", por lo que pidió a la ministra un esfuerzo para que la situación fronteriza de la ciudad "no sea una excusa que justifique que los ceutíes tengan una asistencia sanitaria de inferior calidad a la del resto de España".

En la réplica, la ministra recordó al senador que en la actual Legislatura se han aportado los fondos suficientes para la construcción del nuevo hospital civil, cuyas obras están bastante avanzadas y, por tanto, "pronto serán una realidad". Elena Salgado insistió en que se respeta la ley y que, tal y como establece la normativa, la atención a extranjeros solo se equipara con la de las personas empadronadas en los casos de mujeres embarazadas, menores de 18 años y urgencias. "En ningún caso ha habido presión por parte de los responsables del hospital para atender primero a marroquíes en detrimento de los ceutíes y los únicos criterios de prioridad en la asistencia son clínicos, los que atienden a las condiciones del paciente", apostilló la ministra. Tras afirmar que los servicios sanitarios de Ceuta están "adecuadamente dimensionados", explicó que a 30 de abril se había atendido a 788 menores extranjeros no empadronados y 79 mujeres embarazadas.