Afirman los expertos que es la influencia de la Luna, el caso es que las mareas son constantes, imparables, pacientes e inmutables. Llegan, una y otra vez, al asalto de la desafiante costa hasta que, sin que apenas se note, logran transformar la orografía de cualquier Continente.

Sí, así son las mareas….fuertes y ajenas a las voluntades extrañas. En estos días, la verdad es que no se sabe muy bien por qué, se está produciendo un fuerte cambio en lo que se da en llamar la “opinión pública” (que en definitiva, no me cansaré de repetirlo, somos usted y yo) que se está sensibilizando con la Marea Verde (así se denomina al movimiento educativo en contra de los recortes en la Educación Pública, la de tod@s).

Los docentes, apoyados por los padres y madres de alumnos (usted y yo, lo diré una vez más por si no había caído usted en la cuenta) están en pie de guerra; en la calle, en los centros docentes, en las redes sociales y hasta en las paredes, que cada vez hablan más ante la intoxicación oficialista, dónde se clama que los recortes en Educación equivalen a castrar la formación de quienes, mañana o dentro de un rato, tendrán las diversas riendas de nuestro País.

Este Movimiento, que se intentó desprestigiar con eso de “los docentes son unos vagos y no quieren trabajar dos horas más”, está resultando ser mucho más importante de lo que en un principio podía parecer.

No, no se piden unos pocos de Euros de más para la hipoteca u horas de menos para invertirlas en padel. Ahora, se están reclamando más medios para que, en la Escuela Pública, la escuela de Tod@s y para Tod@s, se pueda educar a nuestros hijos e hijas en las mejores condiciones. Quizás haga falta repetir, por si no ha quedado suficientemente claro, que esos y esas que a diario enseñan la belleza de la poesía, la magia de las cifras, lo apasionante de la naturaleza, los secretos de la Historia o los códigos para descifrar el idioma extranjero, esos y esas que se pasan casi todo el día con sus alumnos (es decir, nuestro hijos) han dicho basta a tanto atropello social, a tanto guillotinaje formativo, a tanto fusilamiento cultural, a tanta inmundicia disfrazada de recortes por la crisis.

La lógica es aplastante: a menos medios, menos educación lo que, consecuentemente, agrandará el foso: sólo los que más tengan accederán a los conocimientos y el resto, no. Simple, aritmético y demoledor

Con la perspectiva que sólo otorga el Tiempo, quizás algún día nos demos cuenta de que esta Marea Verde está teniendo la misma importancia que, en su momento tuvo Ferrer i Guardia cuando inventaba una “Escuela Moderna” libre de yugos, de dogmas y de etiquetas.

La Marea Verde avanza, a pesar de los pesares, a pesar de los distintos Ministerios de la Verdad y también a pesar de los sempiternos “Chicos de los Recados” siempre dispuestos éstos a explicarnos y justificarnos las bondades de nuestros sufrimientos. La Marea Verde es pues esa voz de la conciencia que nos recuerda, a diario, que la aventura del Saber empieza en una simple escuela, sigue en el instituto y se prolonga en la Universidad.

Como dice mi mañica preferida, no hay nada más hermoso que transmitir conocimientos…siempre que te dejen, claro.

Aquí, Al Sur del Edén, ojalá las crónicas lleguen a contar algún día que un puñado de docentes provocaron tal Marea Verde con su aplastante lógica que el tenaz continente no tuvo más remedio que ceder…Ojalá, pero eso también depende de usted y de mí…¿le suena?

Una “escuela pública de tod@s y para tod@s”, toda una visión de futuro.