He asistido al acto inaugural del curso académico 2009-2010 de la Universidad de Granada en Ceuta, celebrado el pasado viernes, 2 de octubre, que presidió su Rector, el profesor González Lodeiro, recientemente nombrado doctor 'honoris causa' por la Universidad de Moscú.

 

Normalmente no suelo acudir a estos actos protocolarios, pues me interesan más aquellas actividades que tienen que ver con el desarrollo científico de alguna disciplina. Y además, me pongo nervioso cuando veo a tanto doctor con traje académico, birrete incluido. Sin embargo, en esta ocasión tenía un especial interés, pues venía el mismísimo Rector y quería escuchar de su boca el futuro que tiene preparado para los centros universitarios de Ceuta. Pero también quería comparar su oferta con la que el director del centro asociado de la UNED en nuestra ciudad hacía el pasado miércoles, 30 de septiembre, en las páginas del diario El Faro de Ceuta.

 

La cuestión es que hace unos meses, varios diarios locales se hacían eco de la noticia difundida por el Partido Socialista del Pueblo de Ceuta, en el sentido de que, por problemas presupuestarios, la Universidad de Granada podría restringir los estudios de algunos de los nuevos grados adaptados al plan Bolonia en Ceuta a solo dos cursos, con lo que, para poder completarlos, los alumnos tendrían que desplazarse a Granada, o continuar por la UNED. Esta noticia, que nadie desmintió, y que venía de uno de las formaciones políticas mejor informadas de la ciudad (quizás por eso la inteligencia del ejército estuvo espiando a algunos de sus dirigentes), me pusieron en guardia.

 

La verdad es que a mí no debería preocuparme este problema, pues mis actividades docentes están repartidas entre ambas universidades. Como dice la canción, una es el amor sagrado, compañera de mi vida desde hace muchos años, y madre de muchas de mis batallas intelectuales. La otra es el amor prohibido de mi juventud, que ahora he recuperado y paseo por medio mundo, y a quien no renunciaré. Sin embargo, el futuro de ambas en Ceuta me preocupa, pues soy de los que cree que de una inteligente mezcla de las dos podremos construir el modelo que necesitamos.

 

Pero por fin se me han disipado casi todas las dudas. Escuchando atentamente las palabras del Decano y del Rector, y preguntando a ambos directamente por sus planes para nuestra Facultad en Ceuta. Y además he salido del acto académico celebrado con un agradable sabor. Su sencillez y algunos fallos de protocolo, lo han hecho entrañable. Hasta el punto de que, por primera vez, el 'Gaudeamus Igitur' me ha emocionado.

 

Lo primero a destacar ha sido la magnífica conferencia pronunciada por el Dr. De Teresa Galdón, sobre las bondades del ejercicio físico para la salud y la felicidad de las personas. Lo segundo, las palabras del Decano, que ha sabido presentarle al Rector las principales preocupaciones y necesidades de nuestra Facultad, que hábilmente han sido contestadas por éste. Y por último, las esperadas palabras del Rector.

 

Lo más interesante. La Universidad de Granada ha sido elegida, dentro de un grupo de 15 universidades españolas, para presentar un proyecto de 'Campus de excelencia' internacional, lo que supondrá una inyección presupuestaria extra, de la que espero que nos beneficiemos en Ceuta. Una de las razones. La peculiaridad de ser la única universidad española con campus en dos continentes. Otra razón. La situación estratégica que ocupa para servir de punta de lanza europea en todo el Norte de África. Y entre sus objetivos, varios importantes. A final de año se aprobarán los nuevos grados de Educación y de Enfermería para Ceuta. Claro, el Rector me aclaró que al hablar de Educación se refería a la Facultad de Educación y Humanidades de Ceuta, en donde, además de las carreras de Educación, están las de Empresariales y de Informática. Y también van a potenciar la estancia en Ceuta de estudiantes de otras nacionalidades.

 

Es decir, que los nuevos grados de empresariales y de informática, completos, se impartirán en Ceuta, a pesar de los problemas presupuestarios, según palabras del Rector. Y también, que Ceuta se convertía en una opción universitaria importante, tras lo del 'Campus de excelencia'. Lo que no nos aclaró fue si nos trasladaríamos al Campus proyectado por la Ciudad, ni las relaciones con la futura Universidad de los dos Reyes que se proyecta entre Ceuta y Tetuán. Aunque, si se llevan a cabo los planes que se tienen para nuestra Facultad, estaremos en el camino adecuado para dotar a esta ciudad de una oferta universitaria de calidad, y no sólo de unos cuantos edificios más o menos bonitos.