- Se han escrito infinidad de libros, se han producido acontecimientos históricos que han marcado a la humanidad por esta denostada palabra.

En un pequeño artículo ni se va a descubrir nada, ni se va a añadir algo que se desconozca sobre este tema; pero el inconformismo ante la misma, en el tiempo y lugar que se produzca, siempre permitirá abrir algún resquicio, por donde entre alguna pequeña cantidad de oxígeno en este ambiente de aire viciado que nos envuelve.

En tiempos anteriores criticar al capitalismo colocaba enfrente la maldita palabra del comunismo, que afortunadamente perdió su puesto privilegiado en la economía de la mitad de Europa, después de la caída del muro de Berlín. Con el capitalismo habíamos convivido y nos parecia el mar menor. Craso error, que nos está tocando pagar muy caras las consecuencias de una de las mayores crisis desde hace más de ochenta años, gracias al capitalismo salvaje que anda campante y sin control.

El capitalismo no deja de crecer y sus tentáculos se multiplican ahogando al indefenso ciudadano, pero también a las grandes formaciones políticas internacionales y la supervivencia de países del mundo occidental, por no decir las consecuencias de falta de alimentos, agua, educación… para los millones de personas en los países tercermundistas. Sin embargo, desgraciadamente no hay que marcharse de nuestra calle para posiblemente comprobar alguna de las consecuencias de la crisis. Como vemos más próximo lo que está sucediendo, hablamos, nos lamentamos, nos indignamos, es natural.

Es necesario reaccionar, por supuesto de un modo pacífico y racional, el pueblo está haciéndolo con multitud de protestas, manifestaciones, huelgas, con el importante papel que deben desempeñar las Organizaciones Sindicales, pero la bestia capitalista continúa creciendo y su agresividad aumenta, especialmente con los más débiles. Grandes potentados multimillonarios con responsabilidades en el mundo de la economía exigen a los trabajadores más sacrificios y menos salarios, mientras sus fortunas continúan creciendo.

Recientemente hemos podido comprobar las duras condiciones que Europa impone a algunas entidades financieras, pero como decía el Comisario Sr. Almunia, los responsables son los pésimos gestores que han tenido en las altas esferas dichas entidades financieras. Sin embargo, los paganos de este feroz capitalismo mal gestionado, sus víctimas no son los gestores que han tenido desorbitados ingresos salariales, sino los esforzados empleados de las oficinas y los clientes que han sido interesadamente mal aconsejados por ofertas especulativas, mientras la falta de circulación de crédito cierra pequeñas y medianas empresas.

Sin despreciar la importante labor que puede desempeñar nuestro Gobierno, especialmente si cambia drásticamente los recortes de su gestión que incrementan el sufrimiento de los ciudadanos, no puedo evitar recordar algunas de las palabras y mensajes que se han lanzado en la celebración del éxito del PSOE en las elecciones de 1982. Nadie pone en duda el gran impulso que se produjo en la modernización de nuestro país, gracias al apoyo que los ciudadanos dieron al Partido Socialista y a su Secretario General D. Felipe González.

Se fortaleció y consolidó la democracia, se rompió definitivamente el aislamiento de nuestro país con el ingreso en la ahora llamada Unión Europea, el desarrollo de las infraestructuras, el cambio y mejoras en la sanidad, pensiones, educación, donde a los colegios públicos llegó abundante y nuevo material escolar, mayor número de profesores especialistas, la mejora en la atención a la diversidad con programas de atención a los más débiles como fue la educación compensatoria. El equilibrio con los colegio concertados que no perdieron sus derechos, fueron escrupulosamente respetados y mejoraron su atención. La creación de los Centros de Profesores. El fortalecimiento de la actividad económica. La modernización de nuestras Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad del Estado, convirtiéndolos en uno de los pilares básicos de nuestra democracia. El reconocimiento del papel de la mujer…

Lo anterior creo que escasa gente lo niega, pero lo celebrado estos días tiene que servir para un nuevo y renovado impulso. Pues el PSOE tiene que continuar con la labor y trabajo que sus dirigentes y militantes y simpatizantes vienen desarrollando, pero España y la ciudadanía exigen todavía más por el imponente capitalismo insolidario que nos domina. En la situación que nos encontramos, durante las 24 horas del día y los siete días de la semana debe ser plena la dedicación de la Socialdemocracia nacional e internacional, para que este capitalismo deje de asfixiar a las empresas y ciudadanos.

Cuando me refería a reaccionar aludía especialmente a los hombres y mujeres del Partido Socialista, para que como dijo D. Felipe González, este partido vuelva a sus niveles de mayoría, para que España salga más fortalecida con la mejora de las necesidades de sus ciudadanos y una economía que esté al servicio del bien común. El PSOE no está en el gobierno, pero este hecho debe animarle más en su trabajo cotidiano, sin prepotencia, sin complejos y con todo el respeto que se merecen el resto de fuerzas políticas e instituciones. En esta línea viene desarrollando su labor todo el Equipo del PSOE de Ceuta, con José Antonio Carracao a la cabeza.