Este 1º de Mayo, tras cinco años de crisis, se caracteriza por la constatación del fracaso de las políticas neoliberales, cuyos efectos dramáticos han aumentado la destrucción de empleo, la pobreza y las desigualdades.

Estas políticas, ordenadas de las altas instituciones europeas, están debilitando el modelo social europeo, sustituyéndolo por un modelo ultraliberal de "sólo mercado", en el que a los países periféricos, como España, les corresponderá competir en base a una profunda reducción de los salarios y de los derechos laborales y sociales.

España está sufriendo un doloroso proceso de reformas injustas y políticas ineficaces. La pésima situación económica, lejos de reconducirse, se agrava. Nos acercamos vertiginosamente a los seis millones desempleados. Las expectativas, ya en recesión económica, auguran un aumento mucho mayor del desempleo, por la extensión de los despidos al ámbito de las administraciones y servicios públicos y por los efectos, en el ámbito privado, de la contracción drástica de la inversión pública. La brecha entre ricos y pobres aumenta cada día. Nuestra Ciudad es un claro exponente de esta tragedia. La población desempleada ya ha superado el 35%, situándonos como la región con más paro de España. Desde aquí queremos expresar nuestra indignación por la pasividad mostrada por las administraciones públicas locales ante esta situación de evidente emergencia social. Nos preocupa especialmente el daño que se está provocando a la juventud. Las dificultades para que las personas jóvenes encuentren empleo, limitando severamente sus posibilidades de desarrollo personal, constituyen un problema social de primera magnitud. Ante este desolador panorama, el Gobierno del PP ha respondido con una dura ofensiva contra los trabajadores, marcada por la puesta en marcha de drásticos recortes presupuestarios y profundas reformas estructurales, entre las que destaca la reforma laboral por sus efectos lesivos. Supone una reforma brutal, que facilita y abarata el despido, precariza las nuevas contrataciones, desequilibra a favor de la empresa las relaciones laborales, aumenta la desigualdad y genera nuevas formas de discriminación y debilita la negociación colectiva. El Gobierno debe escuchar a los millones de personas que han expresado su malestar y profundo rechazo a la reforma y a los recortes sociales. UGT y CCOO daremos una nueva oportunidad para el dialogo y la negociación. Sin embargo, no parece ser esta la línea escogida por el Gobierno. Así lo demuestran los Presupuestos Generales para 2012 presentados el 30 de marzo, que generarán menos actividad económica, más paro, una reducción de la calidad y cobertura de los servicios públicos y un debilitamiento de la cohesión social. En definitiva, más injusticia y más desigualdad, a la vez que se premia a los defraudadores con una amnistía fiscal. CCOO y UGT reclamamos una negociación para alcanzar un gran acuerdo nacional para la reactivación de la economía y la generación de empleo suficiente y de calidad. UGT y CCOO reclamamos respeto a la autonomía de empresarios y sindicatos en el ámbito de las relaciones laborales; defendemos el beneficio que a la cohesión social aportan los convenios y acuerdos sectoriales, compatible con el desarrollo de la negociación en la empresa; promovemos que la defensa y la creación de empleo sea el núcleo central de la negociación colectiva. CCOO y UGT reclamamos al Gobierno la apertura de un proceso de negociación para cambiar en profundidad la reforma laboral, centrar las políticas públicas en el crecimiento económico y la creación de empleo, en la defensa del modelo social, los servicios públicos esenciales y la cohesión social. UGT y CCOO llamamos a los trabajadores y trabajadoras, a los ciudadanos y ciudadanas, a movilizarse en defensa del modelo social y por el empleo.
EXIGIMOS TRABAJO DIGNIDAD Y DERECHOS

 

¡NO A LA REFORMA LABORAL!

 

¡SERVICIOS PÚBLICOS DE CALIDAD!

 

¡POR LA IGUALDAD Y LOS DERECHOS SOCIALES!

 

¡MAS INVERSION Y MENOS RECORTES!