- Personalmente pienso en la posibilidad, cada vez más cercana, de la formación de un nuevo Gobierno de cambio y de progreso, que estará encabezado por Pedro Sánchez.

Una evidencia de que esto sea posible son las reacciones en las formas y en las manifestaciones del PP. Se están intentando redoblar los mensajes del miedo, por los dirigentes que acompañan al señor Rajoy.

La cultura del miedo y la incertidumbre ha sido sutilmente empleada en la historia de nuestro país. De ese modo se aseguraba la permanencia del sistema dominante. Los cambios podían ser la fuente de infinidad de males y tragedias. Había que dejar todo bien atado. En nuestra historia podemos apreciar la existencia de la inquisición, la desconfianza en las reacciones de la ciudadanía, porque no estaba plenamente madura, donde lo correcto quedaba circunscrito a un grupo reducido, que eran los poseedores de la verdad.

Cada uno puede expresar lo que quiera y pensar como estime, mientras se respeten los derechos. Ahora bien, resulta que estamos en democracia, algo que no fue fácil consolidar. Este sistema permite que podamos liberarnos de los miedos con más facilidad, no obstante, el miedo fue algo que costó vencer y en cualquier momento puede pretender instalarse.

Sentir miedo es algo humano, pero como decía el Alcalde de Madrid, Tierno Galván: “Hay que perder el miedo al miedo”. Se está intentando inocular el virus de la preocupación, el miedo a la huida de las inversiones, la seguridad de las pensiones, los sueldos, la estabilidad… Resulta paradójico, que los agoreros de la inseguridad, no vean determinadas realidades que sí dan miedo e indignación.

El hecho de seguir oprimiendo a las clases medias y trabajadoras con impuestos y recortes, las graves bajadas de reservas en la caja de las pensiones, la falta de determinación en abordar y liquidar con transparencia los casos de corrupción, como últimamente está sucediendo en Madrid y Valencia…

Nuestro país está demostrando una pluralidad, que no se puede obviar. Pedro Sánchez no tiene miedo a esa pluralidad. Con los partidos emergentes se podrá estar o no de acuerdo, pero tienen toda la legitimidad democrática y hay que hablar con ellos. Eso sí, para evitar colisiones están las leyes y la Constitución, a las que todos los ciudadanos tenemos que respetar. Pero Pedro Sánchez no va a dar un salto en el vacío, es el líder del PSOE, que representa a la socialdemocracia en España.

Si echamos una mirada retrospectiva a la historia y siguiendo algunas consideraciones de José Félix Tezanos, que presentó en su conferencia,” Los orígenes del socialismo: la utopía social”, en la Fundación Pablo Iglesias del Partido Socialista, nos encontramos que a lo largo de la historia, para enfrentarse a la desigualdad, se han producido diversas formas de reacciones y actuaciones, que han ido evolucionando y cambiando hasta llegar al momento actual.

Podríamos detenernos y analizar desde las primeras sociedades agrarias, el modelo de Licurgo, las utopías religiosas y renacentistas, la Revolución Francesa, diversas formas de actuaciones, las organizaciones internacionales, hasta que llegamos a la fundación del Partido Socialista en 1879, que ha sido el segundo partido socialista que se creó después del alemán.

Frente a los agoreros del miedo, la alternativa socialdemócrata que representa el PSOE, en estos momentos es más necesaria que nunca, como ha manifestado Rafael Simancas. Entre otros, los valores que defiende son: “La igualdad, libertad, democracia, exigencia ética, sostenibilidad, participación, transformación, transparencia…” Valores, que unidos a la justicia social y la solidaridad, han permitido y han conseguido elevar las cuotas de bienestar de los principales países europeos.

Por su parte, el Secretario de Organización del PSOE, César Luena, haciendo referencia al socialismo del siglo XXI, ha manifestado: “El socialismo es comportamiento ético, es responsabilidad, es la alternativa al capitalismo desde la responsabilidad, con un comportamiento moral de libertad, igualdad y fraternidad… que van a posibilitar una redistribución más eficaz, una nueva reforma fiscal y defender la acción del Estado… La socialdemocracia que representa el PSOE es un proyecto autónomo y federal, adaptado al espacio y al tiempo en el marco del socialismo del sur de Europa…”

Pedro Sánchez es el candidato a la investidura de Presidente de Gobierno, porque cuenta con el respaldo de los ciudadanos que lo han votado y con los preceptos constitucionales que lo hacen posible, de acuerdo a la legalidad y la legitimidad que las circunstancias requieren. Se ha preparado dentro de un partido socialdemócrata, ha desarrollado su actividad política en todos los niveles. Ha participado en actuaciones políticas a nivel internacional y en las instituciones europeas. Cuenta con la experiencia de una organización política que tiene más de 136 años de historia, que ha gobernado durante más de veinte años en este periodo democrático. Un partido socialdemócrata, que se ha renovado, respeta a los demás partidos, escucha, dialoga y dispuesto a que un cambio sin miedo se consiga en nuestro país.