Por supuesto, y en primer lugar a nuestra compañera, afectada en primera persona por lo sucedido, quien por cumplir con su obligación se vio expuesta a esta situación de peligro tan grave.

No cabe duda de que la profesionalidad y gran labor, así como la experiencia del personal del Centro, fueron cruciales para que los hechos se desarrollaran y culminaran sin que tengamos que lamentar males mayores.

Por ello, es imprescindible que mostremos nuestro reconocimiento a todos los que en el día de ayer estuvieron a la altura de las circunstancias y resolvieron la situación con solvencia y profesionalidad. Por supuesto, con la inestimable ayuda del Cuerpo Nacional de Policía, quienes pusieron toda su experiencia y conocimientos al servicio del personal del Centro.

Para la Ciudad debe ser un orgullo saber que cuenta con una plantilla de profesionales con gran experiencia, dedicación y conocimientos, capaces, incluso, de ponerse, hasta el límite de sus posibilidades, al servicio de la Ciudad y de los Ciudadanos, incluso, arriesgando su propia integridad.

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