Hace poco saltó a la prensa una noticia que me conmocionó, se iba aplicar inteligencia emocional para combatir el yihadismo en un barrio de nuestra ciudad, ¿este titular no fomenta la islamofobia? Me niego a relacionar pobreza y El Príncipe con el yihadismo, y me niego a ser cómplice del rechazo al islam. Estoy segura que no soy la única a quien le tiembla el pulso cuando escucho comentarios de rechazo hacia la población musulmana, población que ha salido a repudiar el terrorismo y el fanatismo, pero de eso se habla poco. 'La guerra contra el terror', la crisis, la ansiedad acerca de la identidad y las dificultades para hacer frente a la diversidad, han hecho aumentar el resentimiento contra el islam, un fenómeno que a veces se sostiene del lenguaje intolerante que aparece en los medios de comunicación y las declaraciones políticas. Por eso aplaudo la actuación del PSOE que aboga por trabajar activamente contra la islamofobia, la discriminación y los delitos de odio y actuar con contundencia allá donde estos se produzcan. Esto es lo que hace un partido responsable, actuar contra el yihadismo a la vez que lo hace contra la islamofobia. Esto es lo que le ha faltado al PP, el propio Presidente del Gobierno lo ha dicho ““No temo a la islamofobia en España, el enemigo es el terrorismo”. No, ambos se alimentan mutuamente.
Y laicismo. Creo y apuesto por una sociedad inclusiva. No existe otra manera de poner en marcha la igualdad de derechos que desde una Constitución consagrada por la laicidad, desde donde se cimientan las bases del respeto entre todas las personas, independientemente de las creencias. ¿Llegará ese día?, de nosotros/as depende.