"Fue un partido muy útil porque el nivel de exigencia física y atlética fue muy alto. Quizás todavía no estamos a nivel físico finos para igualar la capacidad atlética de un rival como Costa de Marfil. Evidentemente, tenemos más talento y poco a poco nuestras cualidades respondieron a su agresividad con un punto más de dureza. Globalmente, la valoración es positiva. Ellos pagaron esta dureza con muchas faltas, pero es parte del juego. Nosotros debemos ser capaces de no ponernos nerviosos y no rehuir el contacto cuando el rival usa esas armas. El reglamento es el límite y cada uno llega hasta donde puede. Llevan más días y, repito, sus cualidades atléticas son excelentes y ésa es la manera que pueden utilizar para conseguir ventaja en el campeonato. Es lícito. Ayer empezamos a usar sistemas definidos con una ejecución aún imprecisa en algunos momentos".