Al menos tres hombres armados, que asaltaron un edificio que alberga una entidad bancaria en el centro de Kabul, perdieron hoy la vida en un tiroteo con las fuerzas de seguridad, informó a Efe una fuente oficial.
El portavoz del Ministerio de Interior, Zemarai Bashary, explicó que la Policía ha hallado los cadáveres de tres asaltantes en el interior del edificio.
Durante el tiroteo, tres agentes policiales resultaron heridos, según Bashary, que aseguró que los atacantes eran "enemigos de Afganistán", término con el que las autoridades se refieren a los talibanes.
Previamente, una fuente policial había informado de que el asalto había sido lanzado por un grupo de cuatro hombres armados.
Tras conocerse el suceso, el portavoz de los talibanes, Zabiulah Muyahid, atribuyó la autoría del asalto a miembros de la insurgencia.
Las fuerzas de seguridad están efectuando controles y registros a los vehículos que circulan por el lugar del asalto.
En los últimos días la capital afgana está siendo escenario de ataques perpetrados por la insurgencia talibán, que ha pedido el boicot a las elecciones presidenciales que se celebran mañana en el país y ha amenazado a los ciudadanos que participen en los comicios.
Ayer, siete personas perdieron la vida y otras 40 resultaron heridas cuando un suicida lanzó su vehículo contra un convoy militar de la ISAF en las afueras de Kabul.
Además, dos misiles, supuestamente lanzados por insurgentes talibanes, impactaron en los alrededores del Palacio Presidencial capitalino.
Unos 17 millones de afganos están registrados para votar mañana en las segundas elecciones presidenciales que se celebran en el país tras la caída del régimen talibán en 2001.
 

Cuatro niños de una misma familia han muerto esta mañana al incendiarse su habitación en la localidad de Kampen (este de Holanda), según informó el Ayuntamiento de dicha ciudad.
       Los fallecidos tenían edades de uno, cuatro, seis y ocho años respectivamente, y formaban parte de una familia compuesta por dos adultos y otros diez niños, que lograron escapar del incendio.
       Las autoridades locales han instalado en el lugar de los hechos una célula de apoyo para la familia y los vecinos afectados por el incendio, cuyas causas se desconocen por el momento, según la agencia holandesa ANP.

El jeque Abelatif Musa, líder espiritual del grupo radical pro Al Qaeda Ansar Jund Alá (Los Guerreros de Dios), murió hoy en los enfrentamientos entre sus seguidores y las fuerzas de Hamás en la ciudad de Rafah, en el sur de la franja de Gaza.
Además de Musa, otras 19 personas han muerto y alrededor de 120 han resultado heridas en los enfrentamientos armados, que se iniciaron en la tarde de ayer y que se han prolongado toda la noche, según informó el jefe de los servicios de emergencia, Moawiya Hasanein.
Entre los fallecidos se encuentra una niña de ocho años, confirmó esa fuente.
La violencia comenzó después de que Musa, más conocido como Abu Noor Al Maqdisi, proclamase ayer durante las oraciones del viernes (día sagrado musulmán) un emirato islámico en la franja palestina y criticase duramente a Hamás por no imponer la sharía (ley islámica) en el territorio.
Los Guerreros de Dios es el brazo armado del grupo radical suní Jihadi Salafi, cuyo apoyo en Gaza ha ido en aumento desde que Hamás se hizo con el poder en junio de 2007.
Las fuerzas de Hamás rodearon la mezquita donde el jeque Musa pronunció su sermón y comenzó un tiroteo con los hombres armados del grupo, que se prolongó hasta esta mañana.
Hamás impuso anoche el toque de queda y cerró los accesos a la ciudad, para que no llegasen refuerzos del grupo islamista radical.
En estos momentos los enfrentamientos están prácticamente acabados y se prevé que, tras la muerte de Musa, cesen por completo.
Hamás ha detenido a decenas de seguidores del grupo radical, doce de cuyos miembros se encuentran entre los fallecidos.
 

Al menos 29 personas murieron hoy y 50 permanecen desaparecidas a causa de un corrimiento de tierras causado por las fuertes lluvias monzónicas en el estado indio septentrional de Uttarakhand, informó una fuente oficial.
       El desprendimiento de tierras tuvo lugar en el municipio de Munsiyari, en el distrito de Pithoragarh, que se encuentra a una altitud de más de 1.500 metros, según la fuente, citada por la agencia india IANS.
       Hasta el momento, los equipos de rescate han recuperado 29 cadáveres y continúan buscando a 50 personas que permanecen desaparecidas en la zona, en la que desde anoche se están registrando fuertes precipitaciones.
       La inaccesibilidad de las áreas afectadas está dificultando las labores de rescate.
       El jefe del Gobierno regional, Ramesh Pokhriyal, ha anunciado una compensación de 100.000 rupias (algo más de 2.000 dólares) a las familias de las víctimas mortales.
       El monzón, un fenómeno meteorológico que afecta a la India desde julio a septiembre, se cobra cada año numerosas vidas en este país, además de destruir cosechas y sumergir campos agrícolas y otras propiedades, especialmente en las regiones del noreste.