Tras las derrotas ante Noruega e Irán, la suerte de España en el Mundial Sub-21 de Egipto estaba prácticamente echada. Sin embargo, y contra todos los pronósticos, el lunes se impuso a Brasil (al final, la primera de grupo con sólo esa derrota) y ayer a Francia (27-25), con lo que en el triple empate entre Francia (+4 goles), España (-1) y Noruega (-3), con dos derrotas, los nórdicos se quedan fuera por la diferencia de goles. Que España pase a la segunda fase como tercera de grupo sólo influye a efectos del calendario ante Egipto, Argentina y Alemania; la realidad es que, al arrastrar los resultados de la primera fase, la Selección se planta con cuatros puntos, por dos Brasil y ninguno Francia. La situación es la ideal para alcanzar las semifinales.
