A partir de ahí tocará esperar a que esté lista la modificación necesaria del planeamiento para determinar las condiciones que podrá cumplir el nuevo edificio, algo que deberá realizar la Ciudad. En definitiva, el delegado espera que las obras puedan iniciarse como muy tarde para el verano de 2009.
Nuevas dependencias que permitirán según García Arreciado mejorar la situación obsoleta del actual cuartel, con unas infraestructuras modernas y adaptadas a las necesidades actuales del cuerpo de seguridad.