La plantilla de Obimasa ha perdido la paciencia por completo. Así lo constata el sindicato UGT en un comunicado remitido a los medios de comunicación este viernes en el que anuncia que de no tener avances significativos este lunes que permitan vislumbrar la ratificación del convenio colectivo ya negociado, los trabajadores volverán a concentrarse de forma diaria frente al Ayuntamiento, tal y como ya hicieron el pasado lunes, 24 de octubre.

Ese día y con esa concentración saltó a la luz pública el problema que atraviesa la plantilla. Tras cerrar el acuerdo para el nuevo convenio colectivo el pasado mes de mayo, UGT señala al presidente del Consejo de Administración, Yamal Dris, por no convocar al órgano negociador para ratificar el texto y publicarlo en el Boletín Oficial de la Ciudad Autónoma de Ceuta (BOCCE) para dar así oficialidad al mismo y comenzar a aplicarlo.

El sindicato recuerda que más allá del tiempo transcurrido desde mayo para proceder a la aprobación definitiva del mismo, la plantilla llevaba años sin actualizar sus condiciones laborales.

A raíz de aquella concentración, el propio presidente de la Ciudad, Juan Vivas, recibió a una delegación de la plantilla y se acordó entonces que a pesar de los 6 meses transcurridos desde el final de la negociación sería ahora cuando se encargaría un informe jurídico para ver si alguna de las cláusulas pactadas contravenía la legislación vigente. En caso de que no hubiera pega jurídica alguna, el presidente se comprometió a que se ratificaría el convenio en el Consejo de Administración.

Dos semanas después no hay novedad en ese sentido, pero sí en otro. Y es que según recoge UGT en su comunicado, esta misma semana han empezado a circular por la empresa y entre los trabajadores borradores del convenio “modificados por no se sabe quién y negociado por vete tú a saber, con unos intereses que, desde luego, no son los de los trabajadores de OBimasa”.

“Los trabajadores de OBIMASA, a los que ya les quedaba poca, han perdido totalmente la paciencia, pues tienen la impresión, no sabemos si fundada, de que se están burlando de ellos algunos privilegiados que tienen la manga muy ancha para ellos mismos y muy estrecha para estos humildes trabajadores”, recoge el sindicato en su comunicado.

Y ante estos extraños movimientos, en la Federación de Servicios Públicos de UGT se ratifican en que “no vamos a permitir que se modifique ni una coma del texto negociado por los representantes legales de la Empresa y los representantes legales de los trabajadores, salvo que algún jurídico de la Ciudad nos diga que tal cláusula del Convenio es contraria a una ley y un artículo concreto. Ni a ellos les importan nuestras opiniones, ni a nosotros nos importan las suyas. La única valoración legal y válida es la del Área de Trabajo de la Delegación del Gobierno”, ha dejado taxativamente claro el sindicato en su comunicado.

Esa paciencia agotada unida a los extraños movimientos es lo que lleva a la plantilla a decidir que si el lunes no hay solución, volverán a las movilizaciones de forma diaria frente al Ayuntamiento “hasta que el presidente Dris cumpla con su obligación de convocar el Consejo de Administración para ratificar el Convenio. Dado que la justicia y la razón están de su parte, los trabajadores no van a retroceder ni un centímetro y llegarán hasta donde haga falta para que se acabe con la injusticia y con el ninguneo que sufren ya demasiado tiempo”, ha cerrado UGT.