Había ganas de Cabalgata. Muchas, a juzgar por los miles de ceutíes que se han echado a la calle este jueves, víspera de la Noche de Reyes para dar la bienvenida a Sus Majestades de Oriente Melchor, Gaspar y Baltasar. Y de paso cazar alguno de los miles de caramelos que han volado desde las carrozas. 

Puede decirse, a falta de cifras oficiales, que ha sido una Cabalgata de Reyes Magos de récord. Tras dos años sin Cabalgata —en 2021 ase optó por u formato estático en las Murallas Reales— la expectación era máxima y las calles han sido testigo de ello. 

El público se agolpaba en las aceras desde Maestranza hasta el Revellín desde mucho hora antes de la hora de inicio. Un desfile que se ha hecho esperar hasta poco después de las siete, escoltado por las academias de baile. Más de una hora han tardado las carrozas en recorrer solo la calle Real para desembocar en la Plaza de los Reyes, donde concentraba la mayor cantidad de público. 

Tras el cortejo real, un pequeño ejército de Trace barría los restos de confeti y caramelos, metáfora del final de la Navidad. Ya solo queda abrir los regalos.