El Consejo de Gobierno ha aprobado este martes el gasto plurianual para la iluminación de las fiestas de los próximos cinco años por más de cinco millones de euros. En el se incluyen las luces de fiestas como el Ramadán o el Diwali y también las navideñas, que se han complementado con una nueva adjudicación de "realce".

Precisamente, en la licitación extraordinaria sobre la que informó este medio, que incluye una gran bandera de España iluminada, también se alquiló con su preceptivo montaje y desmontaje una gran bola metálica que se pretendía colocar en Gran Vía. Sin embargo, aunque "sobre plano no había problema en colocarla en ese espacio", la Policía Local advirtió del riesgo que podía suponer para la seguridad y se ha optado por moverla "a la Plaza de los Reyes". 

El portavoz del Gobierno, Alejandro Ramírez, explicó tras el Consejo de Gobierno que mover el ornamento tendrá un coste añadido para las arcas municipales: "En el contrato se incluía el montaje y el desmontaje y ahora tendremos que contratar también, porque no tenemos medios propios para hacerlo, la colocación en el nuevo emplazamiento".

Según indicó, la decisión de añadir más decoración a la ya adjudicada iluminación (el contrato acaba precisamente este año y por eso se ha aprobado el nuevo) partió "del área de Festejos, que disponía de fondos para ello".

La inversión es de 61.583 euros con los que según la relación hecha por la Ciudad incluye un árbol de navidad de diez metros (16.000 euros), la citada bandera (2.750 euros), dieciséis arcos para el Paseo de la Marina (7.520 euros), un photocall que se situará en Gran Vía (7.550 euros), un segundo photocall más pequeño para la misma zona (4.550 euros), quince motivos tridimensionales para la Plaza de los Reyes (4.125 euros) y dos bolas de acero y aluminio de cinco metros de diámetro y otras dos de tres metros para Gran Vía, pasando finalmente la más grande a la Plaza de los Reyes (16.720 euros).

Respecto al nuevo contrato de iluminación para las fiestas se extenderá desde 2024 hasta 2028 y se estima un coste de 5.328.000 euros repartido casi equitativamente entre los primeros cuatro años con un descenso muy marcado, a poco más de 100.000 euros, de cara al 2028.