- Se usa este término breve cómodo para referirnos a la amplia coalición de individuos y organizaciones que trabajan activamente para dar forma a la política exterior de los Estados Unidos (EEUU) en una dirección 'pro-israelí'.

Usar este término no tiene como finalidad sugerir que el lobby es un movimiento unificado con un liderazgo central, o que individuos integrados en el no difieran en ciertos puntos.

El corazón del lobby en EE.UU. Está formado por judíos de este país que hacen un esfuerzo enorme para inclinar la política exterior de EE.UU. De forma que beneficie los intereses de ‘Israel’, sus actividades van desde votar a candidatos “pro-israelíes”, escribir cartas a desconocidos para pedir el voto a un determinado candidato, contribuciones financieras y el apoyo a organizaciones “pro-israelíes”. Pero no todos los judíos de EE.UU. (Como Noam Chomsky o Yacob Rabkin entre otros) son parte del lobby, porque ‘Israel’ no es un tema tan importante para muchos de ellos. En un estudio de 2004, apenas el 36% de los judíos de EE.UU. Afirmó que no estaban “muy” o “nada en absoluto” atados emocionalmente a ‘Israel’.

Muchos de las organizaciones claves del lobby, están motivadas por líneas duras que generalmente apoyan las políticas expansionistas, incluyendo su hostilidad hacia el proceso de paz o los asesinato selectivos. Por otra parte, muchos estarían favorablemente dispuestos a hacer concesiones a los Palestinos, a pesar de estas diferencias, tanto los moderados como la línea dura, apoyan firmemente el apoyo de EEUU a ‘Israel’.

No sorprende que los lideres judíos de EE.UU. Consulten a menudo con funcionarios “israelíes”, para así poder ejercer la máxima influencia sobre los EE.UU., como un activista de una importante organización judía, escribió “para nosotros es rutina decir esta es nuestra rutina política en cierto tema, pero debemos comprobar lo que dicen los israelíes, como organización lo hacemos constantemente”, también hay una norma muy dura en contra de criticar la política israelí y los lideres judíos de EE.UU.

Los judios americanos Han formado una impresionante serie de organizaciones para influir en la política exterior de EEUU. En 1997, la revista ‘Fortune’ pidió a los miembros del congreso que hiciesen una lista con los lobbys más poderosas, el AIPAC (comité americano-israelí de asuntos públicos), era el segundo. En otro estudio del ‘National Journal’ de Marzo 2005, llegó a una conclusión similar, colocaba al AIPAC en segundo lugar igualado con el primero de la lista del poder político de Washington.

El lobby también incluye a antiguos líderes de la Cámara de representantes e importantes Cristianos Evangélicos, que creen que el renacimiento de ‘Israel’ forma parte de las profecías bíblicas, apoyan su actividad de expansión y dicen que presionar a ‘Israel’ es contrario a los deseos divinos.