La banda terrorista ETA ha dicho adiós, 'agur' en euskera, este jueves por la tarde a través de un comunicado hecho público en el diario 'Gara', el cese "definitivo" de su actividad armada después de 51 años de existencia y después de haber cometido un total de 857 asesinatos a lo largo de su historia.

Tres días después de la cumbre celebrada en San Sebastián, la banda armada ha hecho pública su decisión de abandonar su actividad "armada" haciendo un llamamiento a los gobiernos español y francés para abrir un "proceso de diálogo directo".

En concreto, emplaza a ambos ejecutivos a "abrir un proceso de diálogo directo" con el objetivo de solucionar "las consecuencias del conflicto". Asimismo, expresa su "compromiso claro, firme y definitivo" de "superar la confrontación armada".

"En Euskal Herria se está abriendo un nuevo tiempo político", dicen los terroristas, que consideran que "estamos ante una oportunidad histórica para dar una solución justa y democrática al secular conflicto político". "Frente a la violencia y la represión, el diálogo y el acuerdo deben caracterizar el nuevo ciclo", reza el comunicado, que insiste en que "el reconocimiento de Euskal Herria y el respeto a la voluntad popular deben prevalecer sobre la imposición".

"No ha sido un camino fácil. La crudeza de la lucha se ha llevado a muchas compañeras y compañeros para siempre. Otros están sufriendo la cárcel o el exilio. Para ellos y ellas nuestro reconocimiento y más sentido homenaje", reseña antes de señalar que "es tiempo de mirar al futuro con esperanza" y para "actuar con responsabilidad y valentía".

Víctimas mortales vinculadas con Ceuta

Aunque las víctimas del terrorismo no mortales se cuentan por miles y entre ellas figuran muchos más ceutíes, en la trágica lista de 857 asesinados se encuentran cuatro personas directamente relacionadas con la ciudad autónoma: Fernando Fernández, Francisco Pascual, Agustín Muñoz y Mohamed Ahmed, a las que se han dedicado otras tantas calles con sus nombres para rendir homenaje a su memoria.

El 27 de junio de 1975, ETA mató en Ceuta al carpintero Fernando Fernández Moreno después de hacer estallar dos artefactos junto a la Comandancia General y en de la Marina. El general de Brigada Agustín Muñoz, que desarrolló casi toda su carrera castrense en la ciudad, fue tiroteado en Madrid el 5 de marzo de 1979. Francisco Pascual, guardia civil natural de Ceuta, fue acribillado en Orio, en el País Vasco, donde estaba destinado, el 6 de abril de 1980.

El 23 de noviembre de 1984, el policía nacional Mohamed Ahmed fue asesinado después de que varios desconocidos le ametrallaran junto a un compañero.

- Lea, íntegro, el comunicado difundido por los terroristas