Cómo aprovechar los desperdicios del café para las plantas

Cómo aprovechar los desperdicios del café para las plantas
Cómo aprovechar los desperdicios del café para las plantas
Cómo aprovechar los desperdicios del café para las plantas

¿Todavía no conoces los beneficios del café para las plantas? Si no los conoces y el café y la jardinería están entre tus aficiones, no puedes dejar de leer este artículo donde descubrirás lo que el café puede hacer por tus plantas y cómo tienes que utilizarlo. Apúntate a esta tendencia eco y reutiliza los desperdicios de tu cocina. 

Beneficios del café para las plantas

Los restos del café pueden convertirse en el mejor aliado de tus plantas, ya que su uso en jardinería conlleva muchos beneficios. 

El principal beneficio del uso de los desperdicios de café en tus plantas es que mejora la calidad del suelo. Los posos del café contienen nutrientes como nitrógeno, fósforo, potasio, calcio o magnesio que son fundamentales para el buen crecimiento de las plantas, tanto ornamentales como plantas de huerto. Su uso evitará que tengas que utilizar otro tipo de fertilizantes o abonos. Además, si creas tu propio compost, podrás añadir los restos de café molido a la compostera y utilizarlo como abono junto con los demás restos orgánicos compostados. 

Otro de los beneficios es que aporta esponjosidad al suelo y funciona como plaguicida y fungicida contra algunas especies que no queremos tener en el jardín o en nuestras macetas.

¿Cómo utilizar el café para las plantas?

Lo principal que tienes que saber es que el café debe estar infusionado (es decir, utilizado) antes de poder usarlo como fertilizante. El café molido aplicado directamente sobre el suelo puede tener un pH muy ácido y no ser apto para todas las plantas. 

Otra cuestión importante a tener en cuenta es que los posos deben estar sueltos y secos. Para ello, lo más recomendable es sacarlos de la cafetera sobre una superficie plana, esparcirlos bien y deshacer los pegotes que se hayan creado y dejarlos secar totalmente. Hay quienes van guardando los posos en un recipiente mientras están todavía húmedos y los utilizan más adelante. Esto es un error porque puede provocar la aparición de moho en los posos, afectando a su calidad y a las plantas en las que luego se utilicen.

En el caso de utilizar los posos en seco, deben esparcirse sobre la tierra. A ser posible, mezclándola ligeramente para que los posos lleguen a las capas intermedias de tierra. En el caso de macetas es más sencillo. En el caso de césped tendrás que aplicarlo esparciéndolo por encima.

Si prefieres utilizar el café en forma líquida tendrás que poner los posos en agua y dejarlos durante un par de días en una botella o bote sin tapar. En este tiempo se producirá un proceso de fermentación, por eso no debes tapar los recipientes. Pasado este tiempo podrás utilizar esa agua para regar tus plantas.

Utilizando los posos del café como fertilizante contribuyes al cuidado del medio ambiente y de nuestro ecosistema, utilizando los desperdicios de tu día a día y reduciendo tus residuos. Así evitarás tener que comprar y utilizar otros productos (sean químicos o no) para el cuidado de tus plantas. 

Cómo aprovechar los desperdicios del café para las plantas


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