Este viernes era un día grande para el periodista y fotógrafo Javier Sakona que inauguraba en la sede del Instituto Cervantes en Tetuán su exposición de fotografía 'Oxido'. Una serie de de 36 fotografías que emulan a la pintura abstracta y que muestran la belleza de esas manchas que va dejando la vida, en este caso en forma del óxido de los cascos de los barcos que a lo largo de los últimos años han ido pasando por el puerto de Ceuta. Barcos prácticamente en ruinas que accedían al puerto e incluso, en algunos casos, quedaban abandonados en él durante meses. Buques carcomidos por el óxido de la navegación que se han convertido, bajo la mirada de Sakona, en perfectas obras artísticas para disfrute de quien las observa.

La inauguración tenía lugar en la tarde del viernes, a las seis, con importante presencia ceutí. La comitiva la encabezaba la consejera de Educación, Cultura y Juventud, Pilar Orozco, pero hasta el país vecino se acercaban para acompañar a Javier Sakona en un día tan especial integrantes de la Delegación del Gobierno (no en vano, señalaba él mismo en la entrevista que concedía a este medio, el ex delegado del Gobierno tuvo un papel crucial en que esta exposición sea una realidad), del PSOE y de miembros del ámbito cultural de Ceuta que no han querido acompañar al fotógrafo en su primera exposición fuera de España.

La exposición podrá visitarse hasta el 6 de abril en Tetuán pero no será esta su única parada en Marruecos.  'Óxido' ha iniciado una mini gira, explicaba el propio Sakona, con esta primera parada en el Instituto Cervantes de Tetuán, pero irá más allá ya que le llevará también a las sedes del mismo en Rabat y a Fez a lo largo de los próximos meses.

Una experiencia nueva para el periodista y fotógrafo que mostraba por primera vez una parte de lo que se ha convertido en esta exposición en nuestra ciudad. Lo hacía con 'Ex Marginem', hace un año, en el Museo del Revellín, en la que se incluían 10 de las fotografías que se acababan convirtiendo en el germen de la exposición que se ha inaugurado este fin de semana. Era, confesaba, la primera vez que sacaba a la luz algo que para él formaba parte de su intimidad, algo que hacía porque le gustaba, y que al final ha acabado convirtiéndose en esta exposición que le ha llevado a cruzar la frontera para recorrer con ella parte del país vecino.

Ahora llega el momento de plantearse nuevos retos, y así lo hace, con la vista puesta ya en nuevos proyectos que puedan, al menos, darle tantas alegrías como este 'Óxido'.