Mayor presencia de la Unión Europea en Ceuta y mayor consciencia por su parte de que las fronteras de las dos ciudades autónomas, incluyendo a Melilla, no lo son únicamente de España, sino de Europa y, por ende, deben implicarse en su control, defensa y regulación. Esa fue a grandes rasgos la principal idea que transmitió el catedrático de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la Universidad de Cádiz, Alejandro del Valle, durante la presentación de su libro 'Ceuta y Melilla: la Unión Europea en la orilla Sur del Mediterráneo', en la sede de la UNED.

Un trabajo dirigido por el también director del Centro de Excelencia 'Jean Monnet' en el que se recopilan artículos de varios autores, desarrollando asimismo un informe elaborado por el Observatorio de Ceuta y Melilla. En el parte de la concepción de que las relaciones entre España y Marruecos "están desequilibradas desde que nacieron".

Por ende, y ahondando en su argumentación, Del Valle subraya que "la

es un factor necesario para España y para Ceuta. La única forma de compensar ese desequilibrio en las relaciones del que hablaba quizás sea apoyarnos en la UE, conseguir introducirla hasta la médula en las estructuras institucionales, en el ámbito de lo visual y lo simbólico y en las normativas de Ceuta y Melilla".

Plantea en su obra el catedrático la necesidad de dar forma a esa relación entre la UE y las ciudades autónomas a través de un estatuto especial, que las coloque en una situación de singularidad. Abrir las opciones de que entren en la Unión Aduanera, en el Comité de Entidades Locales Transfronterizas o el Comité de las Regiones aparecen para Del Valle como asuntos a tratar de cara a visibilizar en el contexto continental a las localidades españolas en el norte de África.