Es un problema de calado nacional y que recorre todas las administraciones públicas. Los 7.000 millones que habilitó el Gobierno de la Nación para inyectar en pymes y a los autónomos por la crisis provocada por la pandemia de covid no están llegando a la economía. La totalidad de las comunidades autónomas han lanzado ya el grito de alerta porque los requisitos son tan duros que apenas sí estaban teniendo salida esos miles de millones. De los 7.000 habilitados en mayo hace sólo unas pocas semanas tan sólo se habían vehiculizado a empresas y autónomos unos 2.800 millones. El 60 por ciento sigue en las arcas de las autonomías sin salida. Y Ceuta no es una excepción. De los 13,8 millones que llegaron para ese fin a la ciudad, sólo se han recibido 60 peticiones de ayudas y se calcula que podrían ser devueltos 13,5 millones. Por eso MDyC ha planteado una propuesta para impulsar al Gobierno de la Ciudad a que plantee al de la Nación que modifique los requisitos, que tenga en cuenta la idiosincrasia de Ceuta, y que facilite que esos 13,5 millones que podrían ser devueltos se queden en la ciudad aunque sea para destinarlos a paliar otros aspectos de la crisis.

La propuesta ha sido aprobada. La consejera de Economía, Kissy Chandiramani, se ha comprometido a insistir, porque según ha explicado ya se ha trasladado la problemática al Ministerio de Hacienda, al igual que han hecho otras autonomías.

El problema para casi todas las pymes y autonómos del país está en la dificultad para demostrar que han tenido pérdidas del 30 por ciento respecto a sus resultados de 2019. En el caso de Ceuta, como ha recordado la portavoz del MDyC, Fatima Hamed, más difícil todavía, dado que la facturación en 2019 ya se desplomó por el cierre de la frontera al paso de mercancías (el porteo).

La dificultad la ha corroborado la propia Chandiramani al aclarar que sólo se han recibido esas 60 peticiones de ayudas, sobre las 2.000 que por ejemplo acumularon otros planes de ayudas propios como los Ceuta Resiste.

A esa dificultad en demostrar la caída de ingresos, se suma que si se han recibido otras ayudas como las de Procesa o se han asumido las pérdidas con fondos propios es suficiente para ser excluido de esta línea de ayudas.

Hamed ha lanzado dos ejemplos no excluyentes de a dónde se podrían destinar esos 13,5 millones, el serctor del taxi o la necesidad de reconvertir y modernizar el tejido comercial local.

La portavoz del MDyC ha recordado que estos problemas no son nuevos, que ya pasó al ignorar que Ceuta no tiene IVA y no incluir una especificidad en las bases que mencionara el IPSI en las bases generales que rigen las ayudas lo que retraso su puesta en marcha en la ciudad en varios meses por la modificación que se hizo necesaria. Hamed ha afeado al Gobierno que en 20 años no haya sido capaz de lograr que en el Gobierno Central asuman el conocimiento del Régimen Económico y Fiscal especial de Ceuta, crítica que ha trasladado a su vez a las diferentes gestiones de la Delegación del Gobierno en las últimas dos décadas.