La licitación de la modernización del faro 'Punta Almina' hace honor al dicho de "no hay dos sin tres". La Autoridad Portuaria ha vuelto a publicar los pliegos que regirán la contratación de las obras que permitirán 'meter mano' a la emblemática torre tras dos convocatorias desiertas y casi tres décadas sin mejoras.

El último intento tuvo lugar a mediados de diciembre cuando la única empresa concurrente Mediterráneo Señales Marítimas retiró su oferta ante la falta de un Plan de Igualdad. El documento es obligatorio para aquellos negocios que cuenten con más de medio centenar de trabajadores, por lo que la mesa de contratación declaró desierto el fallo.

Anteriormente, a finales del mes de octubre, el concurso ya había corrido la misma suerte con la mencionada compañía como única interesada.

Así las cosas la Autoridad Portuaria ha decidido insistir y volver a ofertar el contrato, valorado en casi 200.000 euros (193.365 euros) que permitirá el telecontrol del dispositivo (como apoyo a los técnicos en sus labores de mantenimiento o en ausencia de ellos) y la retirada del mercurio sobre el que flota la óptica del faro.

La idea es sustituir el sistema actual por uno basado en una baliza giratoria mucho más pequeña y ligera que requiere un menor consumo energético y no resulta nocivo para la salud y el medio ambiente. En la misma línea, para permitir la reducción en los costes de explotación y mantenimiento, los pliegos prevén la sustitución de la lámpara de incandescencia por una de tipo led, que además cuenta con una mayor vida útil.