La medida no está exenta de polémica, dado que justo este 2023 es año electoral, pero, con o sin ella, el Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes a una de esas iniciativas que seguramente acaben llenando las tertulias políticas y que, al margen de la sesuda discusión de polemistas, la juventud entre 18 y 30 años, va a recibir sin rechistar demasiado. Cualquier joven ceutí que esté en esa edad podrá escaparse entre el 15 de junio y el 15 de septiembre a dónde guste en bus o tren y el Gobierno pagará bien el 90 por ciento bien el 50 por ciento del billete dependiendo del transporte que elija. Esto es real, centennials.

Así quienes estén en ese rango de edad entre 18 y 30 años, ambos incluidos, podrán solicitar esas bonificaciones para viajar por España y Europa este verano. El Gobierno prevé bonificar a este grupo de población un 90 por ciento del precio de los billetes de trenes y autobuses que dependen del Estado y un 50 por ciento del previo de los billetes de trenes de alta velocidad y los pases interrail si lo comercializa RENFE. Para la alta velocidad se ha establecido eso sí un tope de 30 euros por billete en la bonificación. Tanto para billetes sencillos como de ida y vuelta.

Se pueden beneficiar de esta medida todos los jóvenes de esas edades con nacionalidad española o de algún país de la Unión Europea, pero que sean residentes en España y que hayan nacido entre 1993 y 2005.

Para ello tendrán que registrarse en la web del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) antes de realizar la primera compra para comprobar que se cumple con los requisitos para beneficiarse de esta ayuda.

El Gobierno de Pedro Sánchez ha justificado esta medida por “la actual situación derivada de la invasión de Ucrania por Rusia, marcada por las tensiones inflacionistas que afectan, entre otros, al sector del transporte de viajeros”. Así considera “necesario adoptar una política pública que facilite a los jóvenes el uso del transporte público en sus desplazamientos, tanto por España como por Europa, durante la época estival de 2023”.

Más allá de la evidente repercusión que pueda tener la medida para las compañías de transporte, el Ejecutivo quiere “facilitar los viajes de ocio” y de paso promocionar el transporte público como “más seguro, fiable, cómodo, económico y sostenible que el vehículo particular”. Y de paso “potenciar” a los jóvenes “su aprendizaje e independencia” y contribuir a “fortalecer las relaciones personales y el sentimiento europeo”.

Para el Gobierno la medida son todo ventajas: se ayuda a los jóvenes, se apuntala el sector del transporte y de paso el turístico, también el rural, y se potencia el patrimonio histórico y cultural.

“España es el segundo país más visitado del mundo, pero cuenta con una gran riqueza cultural poco conocida para muchos españoles, de ahí que una de las finalidades de esta medida sea fomentar el conocimiento del país por nuestros jóvenes, facilitando durante este verano los viajes de ocio”, recoge la nota del Ministerio.

Y parecido con Europa, gracias al descuento del que se podrán beneficiar quienes apuesten por el interrail. 33 países europeos se pueden recorrer con este bonotrén, que en el caso de Italia y Grecia se extiende además a algunas líneas marítimas. En 2022 se vendieron 17.600 de estos pases.