Buenas noticias, por fin, sobre resultados académicos en Ceuta. El director provincial del Ministerio de Educación (ME), Aquilino Melgar, ha elegido la celebración de las II Jornadas 'Escuela, Familia y Comunidad' que este miércoles se han celebrado en el Centro de Profesores y Recursos (CPR) alrededor del 'Informe sobre el abandono escolar temprano en las ciudades de Ceuta y Melilla' para dar cuenta de los datos internos más actualizados que maneja su departamento sobre la evolucíon del éxito escolar.

Y resulta que Ceuta es la región que más ha mejorado su tasa de titulación en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) durante los últimos años. Entre los cursos 2006-2007 y 2008-2009 ha crecido más de diez puntos el porcentaje de alumnos que completa esa fase de su formación. Durante el mismo periodo, la media nacional ha progresado menos de la mitad.

El salto es, además, sostenido: la tasa bruta de población que se graduó en la ESO fue, en el curso 2002-2003, del 71% de media en España y del 46% en Ceuta; en 2006/07, la media española se situaba en el 69,3%, mientras que en Ceuta no llegaba al 52% (51,8%); en el verano de 2009 consiguieron finalizar la ESO un 62% del alumnado local y un 74% del nacional. De esta forma, el diferencial entre el conjunto de España y las estadísticas locales ha pasado en diez años de 24,7 a 12,2 puntos gracias a que la ciudad la mejorado "más que cualquier otra Autonomía".

En declaraciones a Ceutaldia.com el director provincial del ME ha ligado directamente estos "muy positivos y alentadores" registros con la puesta en marcha, hace ya un lustro, de "diferentes programas de refuerzo, apoyo, atención a la diversidad y diversificación curricular que parecen haber dado sus frutos", así como al "alto grado de implicación" de la comunidad educativa ceutí en la lucha contra sus metástasis educativas.

Antes de exponer estas cifras, Melgar ha compartido mesa en las Jornadas 'Escuela, Familia y Comunidad' con la directora del CPR; María José Navarro; el presidente de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA), Mustafa Mohamed; y el vicedecano de la Facultad de Educación y Humanidades de la UGR, Santiago Ramírez; que ha sido el encargado de explicar a los aproximadamente 25 asistentes el contenido del informe elaborado por esta institución universitaria sobre el abandono escolar temprano en las ciudades autónomas, uno de los males principales del sistema en ambas.

La charla de Ramírez se ha centrado en el perfil del alumnado que abandona el sistema escolar y en las medidas o soluciones para abordar este problema. Según ha recordado, los objetivos del estudio conjunto realizado por la UGR y el ME son "obtener el índice de abandono escolar, analizar el perfil del joven que abandona prematuramente los estudios y recopilar las medidas orientadas a retener al estudiante en el sistema educativo".

"¿Por qué?"

Con estos números en la memoria, Ramírez ha lanzado una pregunta al público: "¿Por qué ahora nos preocupa tanto el abandono escolar y todas las cuestiones que tienen que ver con el sistema educativo?, ¿por qué hay 'alarma social' con este asunto? Pues porque", se ha respondido, "la Educación se ha convertido en un valor de progreso en las sociedades modernas".

El vicedecano ha destacado que, hace apenas medio siglo, "nadie se extrañaba de que miles de niños quedaran fuera del sistema escolar debido a los denominados 'exámenes de ingreso'; sin embargo, ahora", se ha congratulado, "vivimos en un mundo globalizado y cambiante que demanda personas en continuo movimiento, que aprendan y se formen continuamente, porque las oportunidades sociales de las personas pasan por el conocimiento, porque quien no estudie se quedará fuera del sistema".

Ramírez ha detallado que la muestra utilizada por la UGR para elaborar su dictamen se ha llevado a cabo con casi 300 alumnos que habían abandonado el sistema educativo: 27% de cultura europea, 71,5% de cultura árabe, 0,7% de cultrua hebrea, 0% hindú y 0,7% de otras culturas. Jóvenes entre 16 y 24 años sin titulación en la ESO o con titulación en la ESO pero que no han conseguido finalizar estudios posteriores.

El perfil de alumnado ceutí que abandona las aulas tiene entre 16 y 17 años cuando lo hace (generalmente en 2º de la ESO), suele acumular dos repeticiones de cursos y suspender las asignaturas básicas (matemáticas, inglés, lengua castellana...) y admite tener "problemas debido a la falta de funcionalidad de los aprendizajes (que no les sirven para “manejarse” en la vida real)". El del abandono escolar es, además, parece, un problema que se da con mayor frecuencia en la periferia, en los colegios públicos y en el alumnado arábofono de familias con pocos recursos económicos y académicos.

"Todos podemos influir"

Partiendo de la máxima de que “todos podemos influir, positiva o negativamente, en la Educación” y de que "o trabajamos conjuntamente, o jamás solucionaremos este problema”, el vicedecano ha desgranado algunas de las propuestas de mejora incluidas en el dictamen, que según ha detallado pasan, entre otras cosas, por fomentar la cultura del trabajo colaborativo entre docentes y entre familias y profesorado; trabajar desde la formación inicial y permanente del profesorado; o "establecer un protocolo de actuación para la detección temprana de las dificultades de aprendizaje".

Los autores del dictamen también abogan por propiciar una disminución de las ratios de alumnos por aula en Educación Infantil, por dar un trato específico al alumnado con dificultades lingüísticas, por "evitar concentraciones de repetidores o alumnos considerados 'problemáticos' en un mismo grupo" y por lograr una "mejor coordinación entre el profesorado de Primaria y de Secundaria".

A título de curiosidad Ramírez ha desglosado las 'reivindicaciones' que los 'fracasados escolares' trasladaban a los profesores antes de abandonarles: "Más comprensión, más motivación hacia su trabajo y más información sobre sobre las acciones de futuro". A las familias, en cambio, les reclaman "que sean más estrictas en la educación, que los apoyaran y atendieran más, que tuvieran más interés por ellos y que participaran más en la vida de los centros escolares".