La denominación debe recibir un informe favorable de la Ciudad Autónoma antes de que sea ratificada por el Ministerio. Digmun aspiraba a auspiciar un movimiento social por bautizar el centro con el nombre de alguna mujer vinculada al ámbito educativo.

El Consejo Escolar del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) número 17, el ubicado en las antiguas dependencias de la Biblioteca Municipal del Polígono que este año académico ya opera de forma totalmente autónoma del CEIP Mare Nostrum, ha alcanzado un acuerdo unánime para proponer a la Administración que el centro sea bautizado como ‘Ciudad de Ceuta’, según ha explicado su director, Francisco Jesús Gómez, a Ceutaldia.com

El director provincial del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD), León Bendayán, todavía no tiene constancia oficial de la propuesta del Consejo, que una vez reciba formalmente trasladará a la Ciudad Autónoma (que tiene representación en el Consejo y se da por supuesto que estará de acuerdo) y a los Servicios Centrales de la Administración competente, que será la que ratifique la propuesta.

La normativa establece que “los centros dependientes del Ministerio de Educación tendran la denominación específica que apruebe dicho Ministerio a propuesta del Consejo Escolar y con informe favorable del Ayuntarniento”. También regula que “no podran existir. en el mısmo municipio. escuelas o colegios con la ınisma denominación especifica” y que el nombre elegido tendrá que “figurar en la fachada del edificio en lugar visible”.

El CEIP número 17 se constituyó oficialmente a través de la publicación de la corresponde Orden Ministerial en el BOE en abril del año pasado.

La presidenta de la Asociación por la Dignidad de Mujeres y Niños (DIGMUN) de Ceuta, Maribel Lorente, pensaba poner en marcha una campaña social para recabar ideas entre los ceutíes con el objetivo de que el centro fuese bautizado con el nombre de “alguna mujer ligada al ámbito educativo” a la vista del “escaso” número de colegios que llevan nombres de féminas, actualmente el IES Clara Campoamor y el CEIP Rosalía de Castro, a los que podrían sumarse el CC La Inmaculada, el CC Santa María Micaela y el CEIP Santa Amelia.

Sin embargo, la Administración difícilmente valorará dos propuestas alternativas, entre otras cosas porque la potestad para dar nombre a un colegio todavía está en manos del Consejo Escolar, que es  “el órgano de participación de los diferentes miembros de la comunidad educativa”. Está formado por el director del centro, que es su presidente; el jefe de Estudios; un representante de la Ciudad; uúmero de profesores “que no podrá ser inferior a un tercio del total”; un número de padres y de alumnos, elegidos respectivamente por y entre ellos, “que no podrá ser inferior a un tercio del total”; un representante del PAS; y el secretario, con voz y sin voto.