La Casa de la Juventud tiene desde este 8 de agosto el noble cometido de hacer de anfitriona para un grupo de chavales venidos a la ciudad con ocasión del archiconocido campo de voluntariado 'Conoce Ceuta'. Tal y como anunció ayer mismo la Administración local, algo más de una veintena de valientes han elegido nuestra salada tierra para pasar aquí unos días de 'relax' y, de paso, dejarse absorber por la siempre intrigante y llamativa realidad caballa.

En esta ocasión, estarán representadas un total de doce comunidades autónomas, a saber: Andalucía, Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Galicia, Madrid, Navarra, País Vasco y Valencia. La circunstancia muestra a las claras el interés que despiertan en el resto de España las dos ciudades autónomas, tanto por su lejanía como por su particular idiosincrasia.

Como cada curso, la expedición ha sido objeto de una suerte de recepción por parte del organismo que encabeza Eva Rodríguez. La misma ha tenido lugar en la sala de usos múltiples de la Biblioteca Pública Adolfo Suárez, donde los muchachos han tenido la oportunidad de conocer todo lo que les depara su estancia en suelo ceutí, que se prolongará, en principio, hasta el próximo día 19.

Pese a que hay algún que otro 'repetidor', la mayoría de los adolescentes se acaban de estrenar en Ceuta. Tal es el caso de Sofía Alcalde, una veinteañera natural de Zaragoza que confiesa que se decantó por nuestra urbe porque la propuesta del área de Juventud logró seducirla por completo. "Me llamó muchísimo la atención; leí bastante al respecto y dije: ¿por qué no?", revelaba.

Aunque "el trayecto hasta aquí ha sido un poco largo", Sofía afronta la visita al lugar donde su abuelo cumplió el servicio militar "con ganas y optimismo". "De momento, lo poco que he visto me ha encantado; espero poder seguir conociendo más durante los próximos días", adelantaba.

Al igual que su nueva compañera aragonesa, Alberto Collado tampoco sabe nada sobre Ceuta. Originario de Badajoz, el joven se ha adentrado este martes en el que será su segundo voluntariado. El primero fue "en Navarra", cerca de la cordillera Pirenaica. Fue allí, entre montañas, donde conoció a una chica que estuvo en la ciudad y que le recomendó encarecidamente que probase la experiencia. "Me dijo que le encantó y que se lo pasó muy bien", aclaraba.

Alberto se ha dejado caer por la Perla del Mediterráneo con un claro objetivo entre ceja y ceja: ir más allá de "lo que se ve en los medios de comunicación". "Tenía interés en visitar Ceuta para ver por mí mismo qué es lo que hay aquí", explicaba.

Abierta la lata, el grupo tiene por delante algo menos de dos semanas para descubrir los entresijos de tan desconocida región. Para asegurarse de que todo el mundo queda contento, la Casa la de Juventud ha preparado un ambicioso programa de actividades en el que la palabra 'aburrimiento' no aparece por ningún sitio.

Tras haber conocido in situ el yacimiento Huerta Rufino, los viajeros harán lo propio con los templos más importantes de cada una de nuestras cuatro culturas. Entretanto, podrán disfrutar de la gastronomía y los cautivadores paisajes que ofrece la ciudad. Según Eva Rodríguez, "la idea es que, al finalizar, difundan en sus comunidades de origen todo lo que han visto durante el viaje".