El incendio en el edificio de colores se ha presentado como el primer reto en el ámbito de gestión en esta nueva legislatura del Partido Popular. Sin antecedentes previos, tanto a nivel administrativo como, sobre todo, en el marco de los expertos, las incógnitas y la incertidumbre se incrementan a diario, mientras los vecinos continúan desalojados de sus viviendas sine die.

Pese a que el Gobierno de la Ciudad apenas tardó en reaccionar para mostrarles su apoyo, la cobertura extendida en el plano económico ha sido, más bien escasa. Los afectados tan solo ha percibido una noche en el hotel municipal, aunque las pernoctaciones fuera de sus hogares ya cuentan cuatro días. Una coyuntura que el portavoz del Ejecutivo, Alejandro Ramírez, ha calificado este martes de “emergencia” para cubrir “a las familias que lo necesitaban”. De la misma forma, ha asegurado que todos los afectados “han conseguido ya reubicarse”. Sin embargo, desde el pasado domingo algunas familias han salido a pedir ayuda en busca de un lugar en el que hospedarse.

En este sentido, desde el Gobierno entienden que se trata de asunto de ámbito privado en el que los vecinos deberán entenderse con sus respectivas aseguradoras, como ha señalado Ramírez. “Se trata de una actuación en la que los seguros empezarán a trabajar”, ha dicho.

Por otra parte, tanto los técnicos de Fomento como la Policía científica se encuentran afanados en las labores técnicas para dilucidar en origen del fuego y, a la vez, se encuentran elaborando un decreto de medidas cautelares, que el Ejecutivo tienen la intención de elevar a la comunidad de vecinos, a la máxima brevedad. Medidas que contemplan desde el mantener el perímetro de seguridad, la presencia policial o el estudio patológico. Este último, lo primero que desprende, según ha especificado Ramírez, es que la estructura se ha visto afectada en una de las zonas, pero no va a causar un colapso del edificio, “ya que los pilares se encuentran en buen estado”.

Pese a ello, el regreso de los afectados es, de momento, sine die. “No podemos dar una fecha exacta ya que sigue habiendo dificultades al reavivarse constantemente pequeños conatos (el último esta mañana), por lo que se hace muy complicado el regreso debido al vapor y las elevadas temperaturas”.