El jefe superior de Policía pudo proporcionar pocos datos sobre la investigación, debido a esta orden judicial, aunque especificó que la inspección ocular del lugar del crímen por los técnicos y agentes de la Policía llevó un día y medio, gracias a lo que se recabaron pruebas y testimonios de posibles testigos que posibilitaron posteriormente la detención del presunto asesino. La Policía no realizó detenciones en los disturbios de la madrugada del martes ya que según José Luis Torres lo principal era "normalizar la situación" y que peligros potenciales como una barricada que ardía junto a una gasolinera no produjesen incidentes de mayor gravedad. Afortunadamente sólo un agente resultó herido leve por una pedrada en una mano.
El delegado del Gobierno quiso felicitar al Cuerpo Nacional de Policía por la operación, y agradecer la colaboración de Guardía Civil y Policía Local en el control de los incidentes.