Bomberos, Policía, Parque Móvil, Acemsa y hasta los trabajadores de Asuntos Sociales se afanan en paliar las consecuencia de la tromba de agua y garantizar la seguridad. Casas encharcadas, garajes inundados, coches atrapados o carreteras cortadas son de nuevo el escenario que deja a su paso la tormenta. También cortes en el suministro eléctrico que afectan a ciertas zonas de la ciudad.
Según el Instituto Nacional de Meteorología, hasta las 8:00 horas habían caído en Ceuta 59,6 litros por metro cuadrado. Cifra que seguro que ha aumentado en las horas siguientes, en las que el agua ha estado acompañada de fuerte viento de levante. La ciudad se encuentra todavía en alerta roja, que el lunes pasará de nuevo a amarilla.