Caballas ha elevado al Pleno de la Asamblea de este martes una moción de urgencia por la que pedía que se declararan de urgencia las obras que son necesarias para que la cada vez menos flamante Estación Depuradora de Aguas Residuales, construida junto al cementerio de Santa Catalina entre en funcionamiento. La obra que costó cerca de 30 millones de euros lleva un año y media terminada, pero aún no ha entrado en funcionamiento ya que para ello es necesario construir un colector que una la red de aguas fecales Norte con la Sur en la altura del Poblado Marinero. Esa obra, entiende Caballas, que es urgente, no así el Gobierno del PP que ha votado en contra de la propuesta.

Ese colector cuesta, según los informes técnicos elaborados por la propia Administración Local citados por el diputado localista Aróstegui durante el debate 6 millones de euros, según la consejera de Fomento, Susana Román, el coste de las obras se eleva a 16 millones, citando también dictámenes de los mismos técnicos municipales. La diferencia presupuestaria aunque no ha quedado muy clara podría deberse a las obras complementarias al propio colector que serían necesarias y que podrían ser en sí mismas más costosas que el mismo “macarrón” que es necesario construir para que la EDAR pueda recoger y tratar las aguas residuales canalizadas de toda Ceuta.

Caballas ha acusado al Gobierno de permitir con su política “errática” en la que prioriza lo “superfluo” de permitir que la EDAR se esté “pudriendo” sin entrar en funcionamiento y con un nulo mantenimiento. Además Caballas entiende que mientras no se proceda a realizar esa obra continuarán los vertidos de aguas fecales al mar. Incumpliendo las directrices europeas por las que ya sancionaron a España por tener 54 municipios en los que en el año 2005 seguían sin tratarse las aguas residuales, uno de ellos Ceuta.

Román ha discutido sobre estas cuestiones. Ha negado que haya vertidos de forma continuada al mar y ha puesto la pequeña estación depuradora de Benzú, que entró en funcionamiento en 2006 como ejemplo de que sí se tratan esas aguas en la ciudad.

La negativa del Gobierno viene fundamentada por la falta de liquidez. Y a pesar de tener recogido el proyecto de colector Norte Sur en su Plan Director de Saneamiento, no hay presupuesto consignado y no lo va a haber hasta que la situación económica mejore y pueda dotarse de financiación a la obra. Es decir, no hay fecha prevista para la obra. Mientras tanto la EDAR seguirá siendo un costoso adorno en Santa Catalina de 30 millones de euros.

Aróstegui ha reconocido que los vertidos no se producen a todas horas. Pero ha cerrado el debate conociendo ya el no del Gobierno, con un resumen de su manera de entender el asunto y de paso las prioridades para invertir. “No es discutible que en Ceuta hay vertidos al mar. Tampoco es discutible que la EDAR lleva terminada y sin funcionar un año y medio. No es discutible que la obra que hace falta se hubiera podido acometer con un 10 por ciento de lo invertido en la Manzana del Revellín o si lo prefieren como estamos cansados de escuchar al señor Martínez decir que el Gobierno ha invertido en los últimos años 600 millones de euros con un uno por ciento de ese total. Es verdad que se trata de un tema ecológico y que el Medio Ambiente por desgracia sigue sin estar en sus prioridades”, ha cerrado Aróstegui.

Al localista ni tan siquiera le ha servido para bajarse de sus posiciones el incremento del coste de la obra. A pesar de los 16 millones ha seguido entendiendo la misma como prioritaria para rentabilizar la inversión del Estado (85 por ciento) y de la Ciudad Autónoma (15 por ciento) en la construcción de la EDAR.

Se ha tratado de un debate en el que una vez más ha salido a relucir el distinto modo de entender la ciudad y sus necesidades que tiene Caballas y el PP. Caballas por boca de Aróstegui ha calificado de “errática” la política de inversiones del Gobierno y entiende que ha generado, en este caso, una situación “límite en materia de salud pública y protección medioambiental”. “No hacen la obra porque no permite presumir porque va por debajo de la tierra y no se ve”, ha sentenciado Aróstegui.

Román ha dejado claro que la obra figura en las prioridades del Gobierno, pero que se llevará a cabo cuando se logre financiación para la misma. Una financiación que pasa en buena medida por el respaldo económico del Ministerio de Fomento o el de Medio Ambiente. Pero parece poco probable que vaya a ser antes.

Aróstegui le ha recordado que las competencias en materia de saneamiento las tiene la Ciudad Autónoma de Ceuta. Y que si el ministerio de turno no puede o no quiere poner el dinero, la Ciudad Autónoma debe ser capaz de asumir sus competencias y construir el colector para ofrecer un mejor cuidado del Medio Ambiente a sus ciudadanos, es su competencia, y de paso cumplir con la normativa de la Unión Europea al respecto.