El secretario general del PSOE de Ceuta, José Antonio Carracao, ha insistido este viernes en la "necesidad" de "adoptar medidas urgentes y retomar políticas de refuerzo de controles que incrementen la seguridad de las fronteras, la dotación de personal suficiente para llevar a cabo las tareas de vigilancia y contención, así como la apertura de un diálogo urgente al más alto nivel con Marruecos”, después de que unos 300 subsaharianos intentasen ayer llegar a Ceuta simultáneamente, lo que obligó a cerrar la frontera.

Carracao ha recordado la Proposición No de Ley que se elaboró durante la reciente reunión que mantuvo en Madrid a petición suya con diputados, senadores y su homólogo del PSOE de Melilla, texto en el que se insta al Gobierno central a "actuar en cinco puntos concretos".

Se trata de "iniciar de inmediato conversaciones al más alto nivel con Marruecos a fin de reforzar la cooperación y la coordinación con sus autoridades"; de "reparar urgentemente los daños materiales y reforzar, donde sea posible, la seguridad de las fronteras"; de "incrementar la dotación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para el control ordinario y también para que puedan actuar ante los posibles intentos de llegada masiva"; de "velar por el estricto cumplimiento de los derechos de los extranjeros que hayan llegado a nuestro país y de aquellos que soliciten asilo o protección internacional"; y de "adecuar urgentemente los medios de los CETI de Ceuta y Melilla a las necesidades, para evitar condiciones de hacinamiento y precariedad provocados por una superación insostenible de su capacidad”.

Carracao ha "valorado y reconocido" el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas "y la coordinación y apoyo de las marroquíes en la frustración del último intento de entrada masiva".

"El alto número de personas y las diferentes formas de penetración en el territorio ponen de manifiesto una coordinación que es necesario investigar ante la posible implicación de redes de tráfico de personas”, ha opinado Carracao, quien opina que “la actuación de las autoridades españolas debe combinar un incremento de la seguridad de las fronteras y de las repatriaciones con el respeto escrupuloso a los derechos de los extranjeros que hayan llegado a nuestro territorio, a quienes debe prestarse la necesaria atención humanitaria y garantizar la efectividad de los derechos reconocidos por nuestra legislación en materia de asilo e inmigración”.

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