Ceuta Ya! ha vuelto a alertar este 31 de julio sobre el cierre de las llamadas "empresas emblemáticas" que lleva meses produciéndose en nuestra ciudad. Mango ha sido la última de ellas en anunciar que baja la persiana para siempre, sumándose, así, a cadenas como Desigual, Foot Locker y Stradivarius.

Desde la formación, consideran que estos hechos, además de dejar "un panorama desolador", constituyen "todo un símbolo", ya que "no son sólo estos gigantes los que se están viendo obligados a abandonar Ceuta, sino que otros comercios de menor renombre están corriendo la misma suerte".

Mohamed Mustafa y los suyos consideran que, al margen de la repercusión sobre el conjunto de la actividad económica y, más concretamente, sobre el empleo, la situación conlleva "un impacto psicológico demoledor, generando la idea de que Ceuta está echando el cierre". Por ello, en Ceuta Ya!, consideran que "es urgente revertir este fenómeno cuanto antes".

El partido tiene claro que, "con independencia de las particularidades de cada situación concreta, a todos los comercios les afecta de manera dramática el hecho de que la frontera esté cerrada". Así, para el propio Mustafa, la coyuntura actual "es consecuencia directa de unas decisiones adoptadas con el apoyo de amplios sectores de la población y las instituciones ceutíes". "A los partidos y agentes sociales que secundan la eliminación de la excepción de Schengen no les afecta el cierre fronterizo porque viven en una realidad diferente a la de más de la mitad de la población", defiende el diputado.

El heredero espiritual de Caballas dice llevar "tiempo insistiendo en que el modelo de ciudad que es bueno para Ceuta es el de una frontera abierta, fluida y segura". En esta línea, Mustafa insiste en que "Ceuta no puede ser una ciudad económicamente muerta que viva en exclusiva de los presupuestos públicos". "Es posible remontar y prosperar económicamente, pero, para ello, es preciso cambiar radicalmente los planteamientos actuales", concluye el líder localista.