El delegado ha acusado al PP de utilizar una institución como la Ciudad para convocar a gente "a defender cosas que no están en peligro", con una intención electoralista. Trescientos "insolventes descamisados que quemen la bandera de España" no pueden "poner en jaque al Estado", según el delegado, que ha calificado la actitud del PP de "soberana barbaridad".
La Administración General del Estado no contará con ninguna representación en el acto que se celebrará en el Ayuntamiento, "contraproducente y que magnifica unos sucesos nimios" para García Arreciado.
Una vez que el PP ha descubierto según Arreciado que "España no se rompe como nos venían contando en los últimos años" han pasado a "querer que sea suya, y lo dicen claramente: somos España. No son España. España somos todos".
Las afirmaciones de "monopolio institucional del país" y los intentos de apropiarse de símbolos han acabado siempre mal según el delegado, que ha vaticinado ese mismo resultado para el PP en las próximas elecciones.