Y eso aunque el Ejecutivo local defiende que el Consejo de Gobierno tiene las competencias suficientes para tomar esta decisión, pero que finalmente se ha decidido su debate en el órgano representativo de la Ciudad porque "no hay nada que ocultar". La decisión inicial había motivado las críticas de UDCE-IU, que había denunciado la falta de democracia en la Asamblea, así como un recordatorio de Delegación del Gobierno, señalando que si el Consejo de Gobierno tomaba directamente la decisión debería demostrar documentalmente su competencia para ese fin.
Los proyectos se llevarán al pleno ordinario de diciembre, o si no a uno extraordinario antes de final de año. Los técnicos trabajan sin descanso según el presidente, ya que es necesario seleccionar objetivos que no estuviesen incluidos en los presupuestos de 2009, pero que sí contasen con el estudio previo y la suficiente elaboración para cumplir con los plazos de inicio y final de las obras. Motivos por el que la Ciudad optará por proyectos que estuviesen previstos, aunque no de forma inmediata.