El presidente de Vox, Juan Sergio Redondo, ha comparecido este jueves para hacer su “repaso” de la última sesión plenaria celebrada cuatro días atrás. Durante media hora exacta, Redondo ha leído su discurso desgranando todas las afrentas y actitudes “antidemocráticas” del resto de formaciones políticas en la Asamblea — PP, PSOE, MDyC y Ceuta Ya— a los que ha englobado en el “partido anti-Vox”.

Redondo, que ha calificado al Pleno de la Asamblea de “deslegitimado, abiertamente destructivo ineficaz e inútil”, no se ha ahorrado su habitual retahíla de adjetivos a la actitud hacia Vox del resto de formaciones políticas, como “bochornoso”, “grotesco”, “surrealista”, “mayúsculo”, o “infame”, acusándolas de “control antidemocrático”.

En una complicada pirueta en la táctica del ‘y tu más’, el presidente de la formación ultraconservadora ha acusado a ese presunto “bloque anti-Vox” de lo mismo de lo que habitualmente se acusa a la formación ultra: “Lo único que buscan directamente es ya desacreditar sin ningún tipo de argumentos, sin ningún tipo de debates, todas y cada una de las propuestas que presenta nuestro grupo”.

Con esta respuesta a las propuestas de Vox, “rehuyendo el debate con nuestro portavoz celos Verdejo”, acusan, “no se mofan de Vox, se mofan de la ciudadanía y eso es especialmente grave, deberían hacérselo mirar”. Redondo lamenta también que, “además de la mofa y el descrédito (las respuestas del resto de partidos) vienen rodeadas por todo tipo de mentiras, engaños, falsedades, de tergiversaciones de la realidad del uso de medias verdades”.

¿Y cuál es el motivo para el vacío que el resto de partidos hacen a Vox?, se preguntaba Redondo para dar la respuesta renglón seguido: poner sobre la mesa “temas silenciados”. Temas, además, “mayúsculos”, ha subrayado, como la conversión del servicio de limpieza en una empresa pública, asumiendo la plantilla de Trace; la Ley de Seguridad Ciudadana —en la que sí recibió el apoyo del PP— o el apoyo al sector agroalimentario español. Una moción cuyo rechazo, asegura Vox, ha recibido el aplaudo de Marruecos. “Y luego quieren que no les llamemos pro marroquíes”, ha deslizado Redondo. 

El presidente de Vox ha aprovechado para insistir en su plan de "municipalización" del servicio de limpieza, defendiendo la conversión de la plantilla de Trace en personal laboral, algo que hará si gana las elecciones, lo que está seguro que sucederá y con mayoría absoluta además:.“Si en 2023 tenemos la confianza de los ciudadanos para gobernar ese servicio será municipalizado con mejores condiciones laborales para la plantilla”, ha prometido insistiendo a preguntas de los periodistas en que los trabajadores de Trace no tendrían que superar una oposición para convertirse en personal laboral de la administración local."Como en Amgevicesa", ha comparado.

El líder de Vox en Ceuta ha hecho además varias menciones personalizadas, entre ellas a la vicepresidenta primera de la Asamblea, la socialista Cristina Pérez, a la que ha calificado de “presidenta de facto”, o a Carlos Rontomé, al que ha calificado de “nacionalista” por sus críticas al hecho de que s representen a debate en sesión plenaria temas de política nacional que obedecen a la agenda de los partidos y no al interés de los ceutíes.