Un salón completamente lleno de personajes de relevancia del mundo político y empresarial nacional. Ese ha sido el auditorio en el que esta tarde el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha puesto sobre la mesa cuál es la situación actual de Ceuta, dos años y medio después de la importante crisis de mayo de 2021, en la que 12.000 personas entraron de forma irregular en la ciudad. Lo ha hecho en el coloquio organizado por el Club Siglo XXI, el mismo en el que comparecía apenas tres semanas después de la mayor crisis a la que se ha enfrentado la ciudad en las últimas décadas y en el que planteaba que Ceuta saldría adelante.

Este jueves, dos años y medio después, Vivas tiene claro que la ciudad ha logrado ese objetivo y lo seguirá haciendo pero tiene reclamaciones en la cartera que no ha querido dejar pasar. Así, el presidente de la Ciudad ha reclamado que el Gobierno cumpla con los compromisos adquiridos, especialmente en lo que se refiere al Plan Integral o la Estrategia de Seguridad Nacional, y lo que considera más importante, que no tome decisiones en contra de la ciudad, como “la derogación de facto del 50 por ciento de las cuotas a la Seguridad Social”. Es por todo ello que Vivas en su intervención de este jueves ha exigido que el Gobierno pase “de las palabras a los hechos”.

Así, Vivas ha exigido al Ejecutivo que actúe en cinco ámbitos: la presencia vigorosa del Estado en la ciudad, la equiparación en la calidad de los suministros básicos, el impulso de un nuevo modelo económico más sostenible y estable, la normalización de la frontera y el mantenimiento de los pilares básicos como la convivencia entre todos los ceutíes.

El presidente de la Ciudad ha querido incidir, además, en su intervención, en la idoneidad de Ceuta como punto de inversión y en la labor de los empresarios ceutíes, “gente dispuesta a que ese sueño se haga realidad”, como el presidente de la Cámara de Comercio o la representante de la CECE, empresarios de generaciones o que llegan por primera vez a Ceuta dipuestos a invertir, lo que sin duda es “una apuesta por el futuro de la ciudad”. Es por ello que a los poderes públicos le pide que cumplan, “un esfuerzo que es una gota de agua en el océano de las capacidades financieras del Estado”.

La españolidad de Ceuta, fuera de toda duda

Una de las cuestiones que ha vuelto a salir a la palestra en el coloquio de este jueves, a preguntas de los participantes, ha sido la relativa a la españolidad de la ciudad. Así, el presidente de la Ciudad ha sido muy claro a la hora de subrayar que “el reconocimiento de la españolidad de Ceuta no nos lo tiene que dar Marruecos”.  Eso sí, ha insistido, “le debemos exigir respeto, que respete nuestra integridad y soberanía y que esto sean una condición indispensable para las relaciones de buena vecindad que todos deseamos”. Para ello, ha explicado, hay que desarrollar “capacidades disuasorias” que eviten que vuelva a suceder lo de mayo del 21.