VOX Ceuta ha despachado este sábado un comunicado en el que se hace eco de la respuesta dada por el Ejecutivo a una pregunta relacionada con las elevadas ratios de alumnado por aula que existen en la Educación Secundario Obligatoria en la ciudad. De su argumentario y de sus deducciones sobre la respuesta del Gobierno se concluye a su vez que el problema para la formación son los 500 alumnos y alumnas que el Ejecutivo contaba antes del cierre fronterizo procedentes de Marruecos.
“El Gobierno implícitamente reconoce en su respuesta que hay un problema”, atribuye la declaración la formación en su comunicado a su diputada por Ceuta, Teresa López. Según la diputada el Ejecutivo “achaca a la configuración geográfica y social de Ceuta y Melilla el hecho de las actuales ratios que encontramos en los colegios de ambas ciudades. De continuar con este tipo de políticas de puertas abiertas solo se llevará al más absoluto colapso a los centros como así sucede en la Sanidad, por ejemplo”, ha afirmado López.
Es difícil saber si la deducción de VOX se aproxima mucho o poco a la realidad dado que la formación, como es habitual no comparte la respuesta íntegra del Ejecutivo y se limita a extractarla.
En lo que citan atribuyen a Moncloa la afirmación de que “la configuración geográfica y social de las ciudades autónomas hace que, además del alumnado que inicia su escolarización en un determinado centro desde las primeras etapas, se matriculen otros estudiantes en etapas posteriores, lo que justifica las medidas que ha puesto en marcha el Ministerio de Educación y Formación Profesional para que el mayor número de alumnos posible pueda alcanzar el éxito educativo. Cada centro se valora individualmente, de manera que aquellos centros en los que se detecta más alumnado vulnerable son los que reciben más apoyo”.
López había preguntado “¿a qué se debe que haya un elevado número de escolares que se incorporan al sistema educativo a lo largo de las distintas etapas?”. Lo hacía al hilo de una anterior respuesta a otra de sus preguntas.
En diciembre, la diputada había preguntado al Ejecutivo por las medidas específicas que se iban a poner en marcha para que las ratios de titulación en Educación Secundaria (ESO) en la ciudad aumentasen. En aquella interpelación la diputada criticaba que mientras en los colegios las ratios superaban la normativa a los menores extranjeros se les atendía con no más de 15 alumnos por aula. Y a eso sumaba la diputada que las elevadas ratios están influenciadas por el hecho de que, antes del cierre fronterizo, constaba que unos 500 alumnos de los colegios ceutíes procedían de Marruecos, según VOX. Aunque como sucede con frecuencia, el dato que arroja la formación no se corresponde con la realidad.
La estadística oficial del Ministerio de Educación, accesible en su propia web cifraba en el curso 2019-2020, el que desbarató la pandemia en marzo, un total de 20.440 alumnos matriculados en la ciudad en enseñanzas no universitarias. De ellos, 1.212 eran extranjeros, un 5,95 por ciento sobre el total. Si se atiende de forma específica a la ESO, ese curso había cursando ese nivel un total de 4.827 alumnos y alumnas, de ellos 152 eran extranjeros, un 3,14 por ciento sobre el total. Esas cifras se mantuvieron en niveles similares al curso siguiente, el primero que arrancó ya con la pandemia en marcha, 2020-2021: 20.354 alumnos matrículados, de los que 1.089 eran extranjeros, el 5,35 por ciento del total. Y 4.880 en ESO de los que 149 eran extranjeros, el 3,05 por ciento del total.
¿Son muchos o son pocos extranjeros? En España en el curso 2019-2020 había matriculados en todos los niveles no universitarios 8.286.603 alumnos, de ellos 862.520 eran extranjeros, el 10,40 por ciento, casi el doble que en Ceuta en proporción. En ESO en total había matriculados 2.012.829 alumnos, de los que 188.980 eran extranjeros, el 9,38 por ciento, el triple que en la ciudad en el mismo nivel. Igual que en Ceuta en España al curso siguiente las cifras se mantuvieron en cifras muy similares.
