Antonio Romero pasará la pequeña historia de la política española como uno de los peores estrategas que ha habido nunca. Tuvo la oportunidad de ser alcalde de Málaga y en un ataque de soberbia rechazando pactar con un PSOE que se había vuelto residual en la capital malacitana, cedió la Alcaldía a Celia Villalobos, que no había conseguido la mayoría absoluta. Luego el PP sí la consiguió, el PSOE es el principal partido de la oposición e IU ha vuelta a la existencia residual de toda la vida y que parecían desear.

Esos eran los tiempos del ‘tijeretazo’ y parece que tanto en el PSOE como en IU han aprendido de ese error. Ahora el PP sabe que si quiere conseguir determinadas alcaldías o, incluso, la Presidencia de la Junta de Andalucía, tendrá que hacerlo por mayoría absoluta y por eso lanza anuncios para movilizar a la totalidad de su potencial electorado.

Centrémonos en el caso de la Alcaldía de Sevilla. Las últimas elecciones municipales fueron ganados por el Partido Popular aunque obtuvieran los mismos concejales que el Partido Socialista (15), a los que había que sumar los tres de Izquierda Unida. Los populares tienen la dificultar de salvar los tres concejales de diferencia que IU aporta (y que ha mantenido esa fiel proporción en todas las municipales), pero es la única oportunidad que tienen para conseguir la Alcaldía.

¿Conseguirán trasvasar votos desde el PSOE a ellos? Sinceramente lo dudo, pero pueden ser los grandes beneficiados del voto de castigo al PSOE en forma de abstención. Dependiendo del grado de abstención del que se vaya informando a lo largo de la jornada electoral sabremos si los populares gobernarán o no la capital hispalense.

Posted originally: 2010-08-18 12:00:37