El del Patio Maravillas ha resultado ser un desalojo ciertamente atípico. Apenas unas horas después de la llegada de la Policía a la calle Acuerdo número 8, los distintos colectivos que vertebran el centro social hicieron los bártulos y procedieron a «okupar» una nueva sede situada a exactamente 420 metros de la anterior. El nuevo espacio del Patio, en la calle Pez 21, abrió ayer sus puertas a los nuevos vecinos, entre los que, por cierto, se encuentra Esperanza Aguirre.
A las 12 de la mañana, justo dos horas antes de que el nuevo Patio ofreciese un vermouth a la gente del barrio para explicar...