Las quejas se acumulan en el Departamento de Transporte de Estados Unidos. Y el enfado de su titular, Ray LaHood, con
Toyota va subiendo de tono, hasta el punto estar estudiando la posibilidad de sancionar a la marca japonesa. De momento, lo que aconseja a los dueños de los coches afectados por los problemas en el acelerador es que no los conduzcan y los lleven al taller sin esperar.