Reino Unido sigue padeciendo la peor ola de frío polar en 30 años, con temperaturas de hasta 20 grados bajo cero en algunas zonas de Escocia y nevadas prácticamente por todo el país, incluido el habitualmente más templado sureste. Miles de escuelas han cerrado hoy sus puertas y muchas de ellas tienen previsto seguir cerradas mañana. La nieve ha afectado sobre todo al tráfico en las carreteras y el transporte aéreo y, en menor medida, al ferroviario.