El presidente de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono, ha confirmado esta madrugada (hora española) en Australia la muerte de Dulmatin, uno de los terroristas más buscados del sudeste asiático y acusado de haber perpetrado l
os ataques de Bali en 2002, en los que murieron 202 personas, la mayoría turistas extranjeros. Se cree que Dulmatin, por cuya captura Estados Unidos ofrecía una recompensa de diez millones de dólares, elaboró las bombas que se utilizaron aquel 13 de octubre en la isla indonesia.